Una Vida En 40 Semanas

Semana 4

CAPITULO 1

.Todos los personajes pertenecen a Masashi Kishimoto.
La historia original de ani-chan Hyuga

4 SEMANAS

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Hace poco mi corazón a comenzado a latir, y aunque aun soy pequeño como una semillita me siento feliz, feliz porque mi cuerpecito comienza a formarse, se harán mis bracitos y mis piernitas, ahora floto por dentro de mi mami.

Mi mami, en estas semanas de que he estado aquí, he podido notar que mami es importante para mucha gente, todos los días está ocupada hablando con muchas personas, aunque no se bien quienes son esas personas, siempre le hablan con cariño y respeto.

Ella aun no sabe que estoy aquí, espero que cuando se entere se ponga tan feliz como yo lo estoy, sé que cuando me hizo junto con mi papi, fue con amor, por eso soy feliz, pero shhh... tengo que ser cuidadoso, aun no debe de saber mi mami que aquí estoy, aun no es tiempo...

En este tiempo que estado en mama he aprendido a conocerla, aunque creo que aun me falta mucho mas por saber de ella, de quien no he sabido es de mi papi, y es que a pesar de que mami tiene contacto con mucha gente diversa se que ninguna de esas personas es mi papi, así que esperare hasta que mami lo vea, mientras me mantendré sin molestar a mami, no quiero que se sienta mal por mi causa...

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Se veía a una joven caminando tranquilamente hacia los campo de entrenamiento, se veia nerviosa por volver a verlo desde de estas tantas semanas, el sol hacia no mucho que había salido, el cielo estaba despejado, señal de que sería un buen día, una fresca brisa movía sus cabellos rosados, que ahora le llegaban casi a la cintura, con un corte de cabello en capaz convidándolo largo y corto, llevaba orgullosa la banda de su aldea como diadema sobre su cabello, vestía unas botas largas ninja, con tacón, unas mallas negras cortas ajustadas que llegaban a la mitad de los muslos, en su pierna derecha una venda junto con su porta armas, en su cadera cinturones con bolsas, cada uno caía en un extremo de la cadera de la joven, en esas bolsas portaba armas y medicamentos, señal de que era ninja medico, en la parte de arriba, llevaba una blusa de red, sin mangas, que la cubría su plano vientre y abdomen, llevaba un chaleco de jounnin que llegaba justo debajo de su pecho, lo llevaba cerrado hasta el nacimiento de sus senos, por lo que no se podía ver que llevaba debajo de este, ella era Sakura Haruno, quien ahora con sus 21 años cumplidos hace apenas unas semanas atrás, se dirigía a entrenar un rato con sus amigos y el.

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Sasuke había vuelto hace un par de años, le costó trabajo su perdón en la aldea, pero al haber colaborado con ella en la cuarta guerra ninja, para el fin de Madara, le ayudo, además de una carta dejada por Itachi, donde narraba todo lo ocurrido con el clan Uchiha, le ayudo a limpiar el nombre de su hermano y de su clan, y en parte de él, con sus amigos no tuvo tanto problema, Sakura y Naruto lo perdonaron, Kakashi también y los demás, bueno los dos primeros ayudaron mucho, además de un cambio de actitud de un arrepentido Uchiha.

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En ese momento el equipo 7 original estaba de nuevo reunido, pero en esta ocasión, la duda era que pasaría con Sai y el capitán Yamato, por un momento estos pensaron dejarían el equipo Kakashi, sin embargo, ellos ya también formaban parte de esa familia, familia que Sasuke tenía que conocer y entender porque sus amigos los querían tanto, y como la hokage no sabía qué hacer con Sai, ya que era uno de los de raíz que sobrevivieron, opto por dejarlos en el equipo, así que ahora ya no eran cuatro, sino seis los integrantes, en un principio les costó trabajo, pero lo habían logrado, ahora eran un equipo, una familia como Kakashi les enseño a todos.

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Así que en ese momento Sakura se dirigía hacia los campos de entrenamiento, hoy estaría con todos sus compañeros, se verían, ya en el campo que se les había concedido, la razón de esto fue que terminaban destrozando los otros, así que los enviaron al campo más lejano para que no lastimaran a nadie con sus entrenamientos, así que ya no encontraban como antes en el puente, sino en la entrada de los campos, por lo que ahí era hacia donde se dirigía.

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Aun cuando se veía calmada era pura apariencia, si algo había aprendido bien por parte de algunos de sus compañeros era a que su semblante no siempre mostrara todo lo que le pasaba, bueno al menos trataba.

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Y es que estaba preocupada pero no quería que nadie lo notase, tenía sus dudas de lo que pudiera estar ocurriendo dentro de ella, pero en realidad tenia tanto miedo de comprobar su teoría, porque de ser cierto eso, que pasaría con ella, no sabría como afrontarlo si bien es cierto que ya era mayor de edad, que hacía un mes había cumplido sus veintiún años, un mes, habían pasado cuatro semanas desde entonces.

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Cuatro semanas desde aquel día, aquel día que había sido tan maravilloso, aquel día que había terminado siendo rodeada por sus brazos, mimada por sus caricias, saciada por sus besos, amada por el hombre que quería, donde había dejado atrás a la niña para convertirse en mujer, esa noche fue maravillosa mágica, única.

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Pero como todo lo bueno tenía un final, la mañana siguiente el frio la había despertado, estaba sola, el se había ido y la había dejado, se sentía tan mal, tan confundida desde ese día no lo había vuelto a ver, por la hokage se había enterado que se había ido de misión, justamente ese día que había despertado sola, y si ya lo sabía, porque no le dijo nada, porque, acaso el no la quieria como ella a él?, no entendía, estaba confundida.

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Por eso procuraba no pensar, prefería estar ocupada, por eso se la había pasado en el hospital, en ocasiones doblando turnos, cubriendo a algún compañero, cuando no estaba en el hospital, estaba con su equipo sin el entrenando, charlando, comiendo, lo que fuera con tal de no tener tiempo para pensar, sus amigas casi no tenía tiempo para verlas, de hecho algunas de ellas estaban de misión y casi no las veía ahora, si bien ella también hacia misiones eran muy simples, así que no se ausentaba mucho de la aldea, por lo que procuraba estar cansada para que cuando llegara a casa, estuviera tan cansada, que solo llegara a dormir, aunque en realidad, el menor tiempo que estuviera en su habitación era mejor, porque hacía que lo recordara y eso le dolía, por eso preferia los turnos nocturnos, que la hacian ausentarse de su hogar, porque le dolia, le dolía pensar que no la quería, que en realidad no represento nada para él, solo fue una más, no, no podía creer que él fuera así, no era posible, él no, no él, a quien le había dado su virginidad, no le podía hacer eso, esa noche se lo dijo, lo amaba, para ella no fue un error pero quizás para el si...
pero había un pequeño problema ella tenia novio y nadie mas que neji hyuga, pero a el no lo amaba si, no a uno de sus compañeros del equipo 7.
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Antes de poder seguir fue sacada de sus pensamientos por sus compañeros, quienes ya se encontraban ahí, incluso su sensei, el cual era el mas impuntual ya se hallaba ahí, por lo que se dio cuenta que sin querer se había perdido en sus pensamientos y eso la había retrasado, se disculpo y se dispusieron a entrenar, dejando así sus ideas al aire y al tiempo...

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Primer capitulo espero que les halla, gustado
Aclaración
sakura peleo muy fuerte con sus padres por lo cual no ha hablado con ellos desde hace  mucho tiempo pero ellos están vivos