La mañana siguiente encontró a los cinco sentados de nuevo en la misma mesa. Lauren se despertó por primera vez sin llorar. Katie y Trisha vertieron el café para cada uno de ellos. Lauren cogió una taza y bebió el líquido caliente. El silencio fue interrumpido por el padre de Lauren, quien se aclaró la garganta antes de comenzar a hablar.
"Estaremos felices de reembolsar todos los gastos." Tomó un momento para que el cerebro de Lauren registrara lo que acababa de decir. Katie, Trisha e incluso la madre de Lauren parpadearon sorprendidas.
"¿Papá?" Lauren susurró. El hombre se pasó la mano por el mentón barbudo. Sus ojos eran oscuros, probablemente de dar vueltas toda la noche pensando en la decisión.
"Nosotros pagaremos por sus estudios, cuotas de libros, alojamiento y comida, gastos de cualquier cosa que se puedan imaginar. Sabemos que les vamos a deber más de lo que podríamos pagar. No puedo empezar a describir la deuda que les debemos por esto. Y mija, espero que llames al menos una vez a la semana." Lauren bajó la cabeza, una pequeña parte de ella se sentía un poco avergonzada por todo.
"¿Estás seguro?" Preguntó Katie.
"Eso depende de Lauren." Su padre respondió. Todos miraron a Lauren. Ella tragó saliva y asintió con solemnidad.
Así fue todo. Lauren se mudó con Katie y Trisha. Sus padres se fueron temprano por la mañana y apenas pocos días pasaron cuando un par de cajas con las pertenencias de Lauren llegaron a la puerta principal. La chica se hizo rápidamente lo más útil posible, haciendo las tareas del hogar, dejándose apenas tiempo libre. Trisha y Katie realmente nunca tuvieron el tiempo para hacerlo y habían contratado previamente una criada. Cuando Lauren se mudó, se encontraron con que ya no era necesario y tuvieron que cancelar el servicio.
Aquella incomodidad inicial en el hogar pronto se fue esfumando. Trisha estaba todavía un poco inquieta por la presencia de la morena, pero se esforzaba cada día para hacerla sentir bienvenida. Katie en cambio aceptó a Lauren sin ningún tipo de problema. Invitaba a Lauren para cocinar con ella, para ver películas con las dos e incluso la invitó a algunos de los partidos que tenían con sus amigos. Lauren participó cortésmente en cualquier actividad que sugirieron y se encontró disfrutando de su compañía.
Una noche, Katie llamó a su puerta justo cuando Lauren se estaba preparando para ir a la cama. La mujer se sentó en ésta, su mano suavemente sosteniendo algo que la ojiverde no pudo diferenciar a simple vista.
"Encontré estos mientras estaba revelando algunas películas antiguas." Dijo Katie. Lauren no quiso hacer comentarios sobre lo anticuado que le parecía seguir utilizando aquel método en la fotografía, pero por los cuadros en las paredes, parecía ser un pasatiempo de la mujer.
"¿En verdad? ¿Qué es?" Lauren se sentó junto a ella, tratando de obtener un vistazo a lo que traía entre manos.
"Estaba esperando el momento en que estuvieras lista. No estoy segura de si eso sea ahora." Katie respondió y al instante Lauren estuvo segura de que tenía algo que ver con Camila. La menor respiró hondo, preparándose mentalmente para lo que sea que la imagen le mostraría.
"Estaré bien." Ella respondió. Instintivamente tocó el anillo de plata en su dedo intentando darse un poco de seguridad. Lauren se irguió cuando Katie le mostró la foto...
Era una foto de las dos durmiendo, Jauregui de inmediato recordó el momento.
"La tomé porque pensé que ustedes dos eran la cosa más adorable que había visto jamás. Lo siento si esto..." Lauren la interrumpió tomando la foto de sus manos.
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Color | Camren |
Fanfic[Adaptación] Cuando Fifth Harmony pierde una de sus integrantes, todos lo resienten. Pero una en especial lo siente mucho más que las otras y se embarca en su propio viaje para descubrir como seguir adelante. |Todos los derechos quedan reservados al...
