Siempre Juntos

El final de mi amada.

Me despierto asustada, ¿Que hora es? El amanecer ya ha pasado, debería de estar en camino. Me como mi desayuno, me lavo la cara y me aseguro de tener todo lo necesario:
Agua...listó
Comida...listó
Cuchillos... Listó
Llevo 12 cuchillos, tal vez sean muchos, pero nunca se sabe.
Acomodó todo y salgo corriendo.
(...)
Después de correr y correr por fin llego a la cornucopia, me escondo en unos arbustos esperando a que alguien aparezca.
Espero y espero pero nadie aparece. Luego de unos 15 o 20 minutos de espera la chica pelirroja sale corriendo a toda prisa, toma su mochila y desaparece en el bosque, corre demasiado rápido era imposible que saliera corriendo detrás de ella.
Luego de unos minutos veo a la chica del 12 salir corriendo, no me detengo a pensarlo y salgo corriendo a su dirección.
Le lanzo un cuchillo y este le da un gran corte en la frente, corro hacia ella y me tiro enzima suyo. Ella forcejea, pero yo soy más fuerte.
-¿Que hay en tu mochila? ¿Acaso es medicina para tu enamorado?-Le pregunte burlonamente, pero ella no me contesto.- ¿Dónde está el enamorado? Oh, ya entendí. Tú querías salvarlo, ¿verdad? que tierna. Lástima que no pudiste salvar a tu amiguita. La niñita. ¿Cómo se llamaba, Rue? Si, la matamos. Y ahora te mataremos a ti.-Saque un cuchillo de mi chaqueta y comencé a pasárselo por el rostro.-¿Por donde empiezo?-Pregunté con una malvada sonrisa.-¿Que te parece si te corto los labios? De todas formas ya no los necesitaras para besar al enamorado.
Ella me escupió en la cara y eso me enfureció totalmente. Tomé mi cuchillo y amague a clavárselo en el cuello, pero antes de poder clavarle el cuchillo alguien tomo mi brazo y me levante de un tirón. Mire quien era esa persona y vi a Thresh muy enojado, el me arrojo contra la cornucopia y me sujeto del cuello impidiendome huir.
-Te escuche.-Me dijo furioso.-Tú la mataste.
-No yo no fui, yo no la maté.-Le dije asustada
-No mientas, escuche claramente lo que dijiste.
El estaba muy furioso y apretaba demasiado mi cuello, observe su otra mano y en ella tenia una enorme roca. Me desespere al ver esa roca y comencé a gritar.
-¡Cato! ¡Cato!-Gritaba a todo pulmón. Thresh observo a ver si Cato venia, y antes de que pueda volver a gritar él me golpeo con la roca en la cabeza. Caí al suelo y un gran dolor se apoderaba de mí, el impacto fue tan fuerte que seguramente me provocó una hemorragia interna. Volví a gritar el nombre de Cato, ja como si él pudiera hacer algo para que no muera.
-¡Clove! ¡Clove!-Escuche su voz agitada a lo lejos.-¡Clove!-Grito desesperado y corrió hasta llegar a mí.
-Cato.-Susurré con mis pocas fuerzas.
-¿Clove qué paso?-Me pregunto desesperado
-Thresh me golpeo en la cabeza con una roca.
-Por favor no te mueras, te necesito, resiste por favor. Matare a todos y iremos a casa. Solo resiste un poco.-Toma mi mano y la aprieta.
-No puedo aguantar más Cato, si de mi dependiera lo haría, pero quien sabe cuantos minutos me quedan.
-No por favor no digas eso.-Sus lágrimas comenzaron a salir.
-Te amo.-Le digo también con lágrimas.
-Yo también mi enana.
-Jamás te voy a olvidar.-Aprieto su mano y comienzo a ver como todo se va tornando blanco. Empiezo a sentir como mis ojos se van cerrando y como mi respiración va disminuyendo.
-No por favor, no te vallas, quedate conmigo, no me dejes...Te amo.-Eso es lo ultimo que escucho. Siento sus lágrimas en mí rostro. Cierro mis ojos y ese es mi fin.