Ghoul (Larry Stylinson)

4.-"Cita en la biblioteca."

En este mundo distorsionado yo
cada vez me vuelvo más invisible y nadie puede notarme..

Harry y Louis se quedaron viendo con un pequeño rubor en sus rostros sin saber que decir o hacer, sólo esperando no romper el contacto visual para no hacer explotar la pequeña burbuja que habían creado. Niall lo único que quería hacer era sacar una fotografía con su celular del par....y lo logró hacer para después comenzar a reír. La señora Henderson miraba divertida a los chicos, pensando que Harry no le había comentado de algún enamoramiento con un humano y decidió ignorar la escandalosa risa del chico con cabello rubio que se escuchaba por todos los rincones de la biblioteca, haciendo que las personas miraran con notable molestia hacía ellos.

-Mi querido Louis.-Lo llamó Niall con una sonrisa burlona.-He recordado que mi tarea ya la he hecho así que, ¿por qué no te quedas aquí con Harry para que te ayude? Ya que él trabaja en la biblioteca desde hace un tiempo.

Louis se preguntó "¿Cómo diablos Niall supo eso?" Lo miró entre asustado y querer asesinarlo ahí mismo.

-¡Harry! ¿No tienes ningún problema con ayudar a Louis, verdad?-Arquea una ceja y abraza a Louis por los hombros. Este piensa en las mil y un formas de asesinarlo cuando estén solos de nuevo.

Harry mira a su abuela nervioso, pidiendole permiso con la mirada y ella asiente, sonriendo divertida ante la cara que tiene su querido pequeño.

-Uh...esta bien.-Lo dice con un tono de voz apenas audible sin hacer contacto visual con alguno de ellos, mordiendo levemente su labio inferior.

Louis pensó que era la imagen más tierna que jamás ha visto en su vida.

-Vayamos a buscar los libros que necesitas, ¿está bien?-Ofreció Harry, tímido.

Louis no pudo emitir sonido de su garganta, así que sólo asintió como un completo idiota.

-¡Y a mi el deber me llama!-Dijo Niall sonriendo, colocandose sus cascos (auriculares) que siempre carga en su cuello para escuchar música en los trayectos.-¡Nos vemos mañana Louis!

Se acercó para darle un abrazo y el castaño le quitó los cascos para que escuchara lo que tenía que decirle.

-Púdrete Niall.-Se aleja y sonríe exageradamente, como si fuera aquel gato extraño del cuento que alguna vez leyó de niño.

-¡Yo también te quiero!

Sin más, salió de la biblioteca con una gran sonrisa (este chico no se cansa de sonreír) y subió a su bicicleta para poder irse a su casa.

Niall no había mentido acerca de haber hecho su tarea. La tenía terminada hace una semana atrás y sabía que a Louis se le iba a olvidar así que por eso lo hizo venir a la biblioteca sólo para que él y Harry pudieran hablar por primera vez.

Ya no quería que su mejor amigo siguiera lamentandose de no poder estar cerca de Harry.

-¿Puedes ir a buscar una mesa? Voy por mis apuntes para que no tengas que estar buscando entre los libros.-Sonríe.-Es que yo acabo de terminar.

Louis tuvo que negar pero Harry lo vió suplicante.

-No será nada igual, te lo explicaré para que sea más sencillo.-Ofrece.

El castaño no tuvo más remedio que aceptar. No se arrepiente haberlo hecho al ver la sonrisa plasmada en el rostro de Harry.

Apretó la correa de su mochila al hombro, tratando de disimular sus nervios y se fué a sentar a una mesa pequeña que se encontraba cerca del mostrador, no sin antes de sonreírle a la señora Henderson que seguía en el mismo lugar, observando todo con una sonrisa traviesa.