Ghoul (Larry Stylinson)

2.-"Depredadores."

Estoy loco después de todo, así que detengo mi respiración,
No se puede deshacer, ya no se puede deshacer...
Incluso la realidad se congela.

-¡Corre Harry!-Gritó su amigo James, riendo ante la situación.-¡Colocate la máscara!

Era una noche común como las demás.

Harry se encontraba recargado en una pared de un callejón viendo las estrellas en el cielo, esperando a su amigo James. Nunca disfrutó matar a las personas así que cada vez que tenía oportunidad, dejaba que sus amigos lo hicieran y él sólo se dedicaba a esperar escondido en algún callejón como ahora. Era muy difícil cuando tenía que hacerlo solo.

Comenzó a escuchar gritos y disparos alrededor.

-Son ellos...-Dijo para si mismo, poniendose alerta. Se trata de la CCG ( Comisión de Contramedidas Ghoul, en base a la Ley de Contramedidas Ghoul).

James le gritó, llevando en hombros a dos mujeres ya muertas. Su estómago rugió al verlas.

-¡¿Cómo te encontraron?!-Gritó Harry, colocandose su máscara de calavera color plateada y comenzó a correr con James detrás de él que se colocó su máscara totalmente blanca con sólo los ojos descubiertos.

-Tal vez hice mucho ruido al matarlas.-Ríe.-Una fué muy ruidosa al igual que no recordaba que hoy es día de patrullaje de esos idiotas.

Harry lo miró incredulo al ver que comenzaba a reir.

-¡Idiota! ¡Debes tener más cuidado!

Por eso los ghoul usan las máscaras. Cuando se encuentran en peligro de ser descubiertos o en alguna pelea, se colocan la máscara para que no logren ver sus rostros.

-Tranquilo, me puse la máscara cuando ellos aparecieron.-Harry suspiró aliviado.-Espero que no te moleste pero primero comí una de vestido negro para poder matar a estas.-Ya sabía como era su amigo así que sólo asintió. -Si te hace sentir mejor, casi me voltea la cara por un golpe que me dió.

Harry río ante el comentario y doblaron en una calle que los llevaba hacía la casa del ruloso. La camioneta negra iba detrás de ellos a unos cuantos metros.

-¡No debemos guiarlos hacía mi casa!

James asintió de acuerdo y miró hacía un lugar fijo.

-¡Sigueme!

Aceleró el paso, aferrando los cuerpos a sus hombros y guió a su amigo hacía otro callejón con dos salidas diferentes. Harry se preocupó por lo que estaba a punto de decir.

-Debemos acabar con ellos.-Comentó el castaño, dejando de correr. El ojiverde mordió su labio con nerviosismo, detrás la camioneta paró y salieron dos chicos armados un tanto temerosos. Se notaba que eran unos completos novatos.

-Sólo son dos.-Dijo resignado y James casi salta de alegría al escucharlo.

-Vamos.-Asintieron. James aventó los cuerpos sin ningún cuidado hacía un contenedor y corrió rumbo a la derecha y Harry a la izquierda.

-¡Tú con el que fué a la derecha, yo voy por el de la máscara de calavera!

El rizado se escondió entre las sombras, sintiendo la adrenalina correr por todo su cuerpo. Sus ojos se tornaron oscuro y de su espalda salió su kagune color verde brillante.