Capítulo 1: Y esa señora?

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Una estampida de adolescentes chillonas corría por las calles de Grecia. Perseguían a esos cuatro jóvenes músicos que corrían como si les fuera la vida en ello.

—¡¡John!! ¡¡John!!

—¡¿Qué!?

—¡¡Oh, por dios!! ¡¡John Lennon me habló!!

—Tres...dos...uno.

Ahí estaba. El sonido similar a una bolsa de papas cayendo al suelo. La joven se había desmayado. John rió y siguió corriendo. Los demás lo siguieron, doblaron en un callejón y perdieron de vista a las fans. Se recostaron en el muro, jadeantes y agitados.

—¿No están?—Preguntó Paul mientras cerraba los ojos.

—No, las perdimos.—Respondió George.

—Que sea la última vez que te olvidas el disfraz, Winston.—Recriminó Ringo.

—Bla, bla, bla. Todo yo, todo yo.

—Emm...Chicos, ¿dónde estamos?

—Humm...No sé.

Miraron a su alrededor. Había edificios viejos, las calles olían a basura y animales callejeros, incluso vieron una rata meterse en el alcantarillado. John hizo una mueca de asco. Odiaba las ratas.

—Ahí hay una señora, preguntémosle—Paul la señaló y los cuatro se apresuraron a alcanzarla.

—¡Señora! ¡Señora!

—¿Si?

Paul frenó de golpe,causando que Ringo chocara con su espalda, John con la suya y George con la de éste. El bajista estaba inmóvil viendo a la mujer frente a él. No se esperaba eso.

Debía tener 70 años, llevaba un raído poncho gris que le llegaba a las rodillas y unas sandalias de cuero. Su cara presentaba las arrugas que debía tener una persona de su edad, pero en sus ojos esmeralda se notaba un destello de juventud eterna. Su cabello era largo, color rubio ceniza, y le llegaba a los talones. Cuando abrió la boca para hablar dejó a la vista la falta de dientes que tenía.

—¿Si, dígame?

McCartney no contestaba y John tomó la palabra.

—Disculpe, ¿sabe dónde queda el hotel Poseidón?

—Son ustedes... ¡Ustedes!

—¿De qué habla?

—¡Oh, benditos sean!—dicho esto, besó ambas mejillas de cada uno, causándoles extrañeza—¡Son ustedes!

—Pues sí...Somos The Beatles...

—No, pequeño. No hablo de eso. ¡Ustedes son los salvadores! ¡Los cuatro elegidos de Zeus!

—No sabemos a qué se refiere.

—Pronto lo sabrán, sus majestades.

Y en un segundo desapareció, dejando a los chicos con miles de dudas rondando sus mentes.

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The Powerfull Four Of Liverpool [McLennon/Starrison]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora