Never Forget, My Lady (MLB)

El arbol de cerezo

Narrador:

El día empezó como cualquiera, los pájaros cantaban, el sol iluminaba las calles de París, también había una azabache que se le hacía tarde para ir a la escuela, Marinette bajo rápidamente de su habitación con unas galletas en su bolsa para Tikki por si acaso, salió de su casa y la ciudad estaba en perfecta tranquilidad, llegó finalmente a su escuela entrando directamente a su salón de clases, segundos antes de que la campana sonara, de paso saludo a los dos morenos y al rubio, sentándose después en su respectivo lugar

-Algún día te será normal llegar siempre tarde no es así?- Dijo Alya en tono burlón, Marinette sólo río, para que después la maestra hiciera su aparición.
Las clases fueron eternas de nuevo hasta que la maestra hizo un anuncio antes de finalizar la clase.

-La escuela fue invitada a una exposición de plantas internacionales, deberán pasar por su pase en dirección, eso es todo.

Todos empezaron a salir, unos se iban directamente a sus casas y otros se dirigían a dirección para el pase, no fue tanta gente como se esperaba, pero unos tendrían en cuenta que valdría la pena el ir, podría ser interesante ver plantas que no se llegarían a ver en París, los cuatro amigos se animaron a ir entre todos, el pase incluido de una hoja decía la información suficiente, la exposición sería cerca de la Torre Eiffel.

Se despidieron y llegaron a sus hogares, preparándose dentro de 1 hora, era inevitable aburrirse así que la azabache salió un rato al parque a diseñar nuevos vestidos, pensaba las posibilidades de encontrarse plantas que ni ella conocía, imaginaba y marcaba en su cuaderno las posibles ropas que serían famosas en un futuro, mientras trazaba las prendas, una persona se paró frente a ella, cuando verificó quien era, no pudo evitar saltar del asombro

-Hola Marinette- saludo el rubio a la azabache después de mostrar una sonrisa por su reacción- Puedo sentarme?

Ah! Ah…c-claro- dijo para después mirar hacia otro lado, todavía no superaba sus tartamudeos y se pensó estando roja esos momentos. Adrien miraba los alrededores  mientras que Marinette trataba de no distraerse y tratando de no disimular su nerviosismo, ya que la mano que sostenía el lápiz temblaba y no le permitía dibujar con tranquilidad

-Cómo crees que será el sitio Marinette?

-Ah, pues n-no lo sé, pero pienso que será muy agradable el lugar, t-tu qué piensas?

-Tampoco tengo idea pero estoy seguro que nos encontraremos cosas sorprendentes- Los dos jóvenes sonrieron, seria todo lo que ellos pensaban. Pasó el tiempo, aprovechaban el tiempo para platicar unos momentos cortos, la hora estaba llegando y el rubio le menciono a la oji azul que si le quería acompañar al lugar, ella no pudo rechazarlo y afirmo tímidamente.
Mientras tanto en la exposición, las personas se preparaban para la presentación de las plantas de sus nacionalidades, en un pequeño rincón de la gran carpa se encontraba una joven de pelo castaño, ojos claros y vestía un atuendo simple y portaba unos lentes con borde verde claro incluido un brazalete en su muñeca derecha, con el símbolo de un pétalo de cerezo, decoraba su mesa y ponía la pequeña información sobre su planta, un pequeño árbol de cerezo que se encontraba en una linda maceta de cristal, mientras terminaba, un grupo de chicas se dirigía a ella

-Oh pero quien tenemos aquí? Lista para presentar un artilugio tan horrendo?- Decía esto acompañado de la risa de sus acompañantes

-No es un artilugio, es la planta de mi madre, nunca le faltaría respeto a ella, estaría orgullosa ver a su hija representar su planta favorita- miraba con felicidad y a la vez tristeza al pequeño árbol

-Jajaja, claro, tu madre estaría orgullosa, si estuviera aquí…chicas- chasqueo los dedos, las dos chicas que se encontraban atrás se acercaron a la joven, una la sostuvo con fuerza y otra le arrebato la planta