Me desperté como cada mañana, con la alarma de mí móvil.Realicé la misma rutina de todas las mañanas. Pero me esmeré en mi atuendo.
Hoy le vería.
Bajé a desayunar sintiéndome plenamente feliz en mucho tiempo.
Como siempre, no había nadie en casa, pero ya no importaba, estaba acostumbrada.
Tampoco importaba que hoy fuera el primer día de clase después del verano, él me recogería del instituto.
Cuando el timbre sonó, cogí mi mochila y salí de casa, sabía que era Kelsey, mi mejor amiga quien llamaba.
No tardamos más de cinco minutos en llegar al instituto.
Era mí último año, después de esto, podría irme a estudiar con él.
Me senté al final de la clase, al lado Kelsey.
El profesor entró en clase, explicando como sería el anteúltimo curso.
Y de repente caí en algo.
—Kelsey,— le susurré atrayendo su atención —nos hemos equivocado de clase, nosotras estamos en último.
—Leslie, estamos en quinto, no en sexto.
Pero ¿qué?
Miré la fecha:
16 de septiembre de 2015.
No podía ser.
Tenía que ser una broma.Pero entonces los recuerdos de ayer me llegaron a la mente como pequeños flashes de luz.
En el coche, me dijo que me amaba, y después de eso...
Nada, después de eso no recordaba nada.
¿Había tenido un accidente?
Oh por dios, ¿Ethan estaba bien?
Necesitaba verle, estaba entrando en pánico.—¡Kelsey! — exclamé hacia mi mejor amiga. — ¿Dónde está Ethan?
—¿Qué Ethan?
—¿Cómo que qué Ethan? Mi novio, hemos pasado todo el verano...
Mi móvil vibró, sacándome de mi paranoia, era un mensaje. Con la esperanza de que fuera suyo lo abrí rápidamente, necesitaba saber si estaba bien. Pero al leerlo me di cuenta de que no lo era.
Estás preciosa.
-N.¿N? ¿Quién demonios era "N"?
Como si me estuviera llamando me giré, y me encontré cara a cara con mi mayor miedo. Noah.La realidad me cayó como un balde de agua fría.
No estaba en sexto grado.
No había cumplido los 17 años.
No te había conocido.
No me habías ayudado.
No me había enamorado.
No habíamos tenido ese accidente.Y nunca había sido feliz.
De repente lo vi todo negro, ¿qué me estaba pasando?
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Remember me
Short Story¿Ayer? Ayer todo era diferente. Ayer volvía a mí casa, en su coche. Ethan sostenía mi mano mientras conducía. En cada semáforo guiaba mi mano hacia sus labios, y depositaba ahí un cálido beso. Nunca había sido tan feliz. Nunca había sido feliz...