Capítulo Uno; Casita del Árbol

60 4 0
                                    

La casa del arbol estaba en silencio, Gwen se encontraba acurrucada contra el sillon con el cuerpo cansado y ojos llorosos cuando escucho un sonido que logro que saltara clmo un gato asustado.

-¡Mierda! -una vocecita maldecia-. Siempre me pasa lo mismo.

-¿Quien anda ahí? -pregunto Gwen asustada pero sin el suficiente miedo como para asomar la cabeza fuera y fijarse.

No hubo respuesta, una cabeza rubia y despeinada hizo su aparicion por la puerta de la casita.

-¿Soph? -pregunto en voz baja la pelinegra.

-Ese es mi maldito nombre -Sophie entro a paso lento y pausado para tomar un lugar en la alfombra peluda-. Tiene un poco de polvo -tosió.

Aunque no le importo demasiado pues apoyo su cabeza contra ella y miro el techo como si fuera la cosa mas hermosa que jamas vio.

-¿Que haces aquí? -Gwen estaba sorprendida, Sophie era un poco impredecible pero nunca pensó que lo fuera tanto.

-Nada -dijo y por fin se digno a mirarla-. Solo pasaba y decidí revivir mi infancia.

-Ajá, y yo me llamo Michael Jackson -bufo Gwen cruzándose de brazos para caer como una bolsa de papas en el sillón.

-No me sorprendería que tengas un amigo allí abajo -Sophie le dio una mirada pervertida haciendo que su amiga soltara una risa.

-Callate ¿Escuchaste eso?

-Hola, casita bonita -se escucho desde abajo-. Hace musho que no te veía.

Las dos muchachas se asomaron por la ventana para encontrarse a una Camille sosteniendo una botella de alcohol en una mano y en la otra una bolsa de papas a la mitad.

-¿Hoy se pusieron todas de acuerdo? -grito Gwen, aunque por dentro estaba emocionada.

-Sho no se de que hablas -grito devuelta Camille alzando la botella-. Lo único que quiero es suuubir y no se como.

Sophie rezongo en silencio pero bajo y ayudo a que Cam pudiera subir.

-Chicas -dijo Camille mientras se recostaba en el sillon-, las extrañe muchooo.

Tomo a Gwen y la abraacurrucandola contra sus senos.

-Cam, no puedo respirar -Gwen trato de empujarla sin éxito.

-Shh, no llores -le palmeo la espalda- que llego la mas linda, no tienes de que preocuparte mas.

-Camille, ya es suficiente -Sophie la aparto-. La dejaste sin aire.

-Es amor, del bueno -sentencio afirmando con la cabeza.

Se quedaron en silencio, las tres mirando hacia el techo, como si estuvieran en su mundo. Hasta que Gwen se sorbio la nariz y pregunto.

-¿Porque estas borracha?

-¿Yo? -Camille se apunto a si misma pero solo obtuvo miradas de reproche-. No se, nada mas entre al super y compre este bebe y estas bebes y ya -levanto la botella de vodka y luego las papitas, dandoles un beso ruidoso a cada recipiente.

Todas estaban tan absortas en si mismas y en nada a la vez que no escucharon cuando Lucy entro a la casita con los labios apretados por el esfuerzo a causa del dolor de tobillo. Era sigilosa cuando queria.

Camino tranquila a traves de las chicas con las bolsas de comida rapida ocupando sus manos y se sento cerca de Camille que solo miraba las bolsas.

-¿Me das? -Cam estiro las manos e hizo morritos como una niña.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 11, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Boulevard of Broken DreamsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora