Dar paseos sin rumbo por el bosque es algo usual en mi rutina. Me gustaría decir que tengo un propósito firme y claro en mis acciones, pero lamentablemente, de hacerlo, no sería cierto.
Han pasado unos cuantos años desde el incidente con mi familia, No olvido el día en el que tallé en mi blanquecino rostro la sonrisa que perduraría hasta el día de mi muerte. Así como tampoco olvido aquellas desagradables reacciones. Ah, el solo pensar en esos días hace que frunza el ceño y quiera ocultar mi rostro en mi larga cabellera.
Es curioso, pero no recuerdo que mi hermano mayor, Liu, haya tenido una reacción negativa.
Así fue como, en algún momento durante mi lento pero firme andar empecé a sentir un poco de nostalgia, de repente vinieron a mi mente algunos recuerdos de cómo era mi vida con mi familia, a pesar de todo lo ocurrido en sus últimos momentos con vida, me puse a pensar en esos momentos felices añejos. Diría que que secretamente, añoraba a todos mis recuerdos por igual, de no ser por los de mi hermano; cómo jugábamos juntos... jugabamos al caballito, jugabamos al remolino; nos tomabamos de las manos y dábamos vueltas hasta quedar completamente mareados, el que se cayera primero perdía. A la vez que el que quedaba en pie lo sostenía para que no se lastimara, algo cobárde de nuestra parte. Pero era, cuanto menos, muy divertido. O al menos, eso es lo que yo recuerdo. Eso sin mencionar al resto de juegos de nuestra infancia.
Quizás jamás me di cuenta de que la posesión más valiosa que tengo no son mis memorias en general, sino puntualmente esas. O más bien, la más valiosa memoria probablemente sea mi hermano en sí.
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El tiempo pasaba y el dolor incrementaba. Aquél deprimido chico de pelo azabache solo podía caer más y más produndo en ese frío y oscuro mar de pesares, felices pero deprimentes memorias en las que escarbando hallabas risas, abrazos, caricias y... en el fondo de aquél polvoriento pozo de recuerdos, amor.
Cada paso que daba lo llevaba más hacia la matriz de sus dolores de cabeza, es decir, su fallecido hermano mayor. No importaba qué tan fuerte soplara el helado frío en su contra, el chico avanzaba. No importaba qué tan profundo se hundieran sus zapatos en la nieve, ni qué tan molesto fuera sentir la humedad en su ropa casi congelada, pues todo eso no se comparaba al profundo sentimiento de soledad y culpa que lo atormentaba cada vez que la luna se asomaba en el horizonte. Desgarradores sentimientos que cortaban más que un cuchillo que roza tu pecho y que obligaban al muchacho a buscar nuevas víctimas que aliviaran el dolor.
"Liu".
Ese nombre... ese corto, hermoso y dulce nombre. Un nombre que Jeff no pudo borrar de su mente ni con el alcohol o los años. ¿Es que acaso su corazón no estaba preparado para ser un asesino?
No, no es eso. Pero si esa no es la respuesta, ¿Entonces cuál es? ¿por qué la única muerte que nunca lo dejó en paz fue la de su hermano?
El de tez blanca sabe muy bien que lo quería bastante, sin importar qué. Pero nunca imaginó qué tanto. El cariño era tanto que le resultaba imposible quitarse el recuerdo de su divertida risa, sonido sus palabras, sus consejos y... además... sus delicadas caricias, calurosos abrazos y... aunque no tan frecuentes, sus dulces besos.
Mientras nuestro asesino se adentraba cada vez más en ese bosque, más pensamientos de los cuales no se había percatado llegaron para atacarlo por la espalda con la guardia baja; En un instante le llegaron recuerdos que le hicieron pensar sobre lo guapo que le parecía su hermano, voces que lo acusaban de haberse quitado a sí mismo lo más valioso de este mundo, ocurrencias y alegatos por partes iguales. La bola de nieve que crecía mientras caía por la pendiente lo llevaron al punto de tener pensamientos obscenos con su propio hermano. Grotesca mentalidad que era juzgada por él mismo, pensando en cómo además de sádico, sínico asesino que calentaba su sangre con los recuerdos de un difunto familiar.
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Amor Sin Reglas (Yaoi - En Edición Y Actualización)
RomansaADVERTENCIA: Este es un libro que contiene yaoi, es decir, amor chico x chico, también contiene lemon. O sea, escenas sexualmente explícitas y en este caso específico, homosexual. Está por demás decir que si eres menor, no quieres perder tu inocenci...