Ouija.

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–¡¿Cómo!? –grita Jev furioso.

El chico lo vio serio, después de haber soltado unas lágrimas se las limpio y decidió reír. La situación se le hizo bastante cómica al llorar por alguien que ni al caso –por más profesor que fuera–. Seguido de eso le contó lo que había pasado y al fin se sintió más tranquilo pero a su amigo no le hacía gracia en lo absoluto.

–Pues si..., eso pasó, pero ya equis.
–¿Cómo que "equis"? ¿Después que ese C*brón te hizo caer en su juego te sale con que está comprometido? ¡Quién c*rajo se cree! ¿Dónde vive? ¡Ahora mismo me va a escuchar!
–Jev...
–¡Es increíble! Ese imbécil desde un principio no me daba buena espina a lejos se le nota lo sospechoso...
–Jev...
–Que es, pero no, no, no, así no se va a quedar ¡qué lo mato! Ni a ti, ni a Gi, ni a nadie le deberían de hacer eso. ¡Ese hijo de...
–¡Jev! –se exalta el adolescente.
–¿Qué?
–¿Puedes relajarte? Ya, ya pasó. No me importa tanto.
–Pero hace un momento estabas...
–¡Lo sé! Y no tengo ni la menor idea de porque me cayeron lagrimas. fue muy estúpido.
–Pero si...
–Ya... Mierda. Por mi, ¡qué le den! Aparte, yo puedo "pelear mis problemas" ¿de acuerdo? No necesito que me ayudes. ¡Yo puedo con ello!

El ojinegro lo observa un momento y decide darse por vencido, resopla y se sienta dándole un sorbo a su cerveza.

–Perdón, enano. Pero es eres mi hermano y...
–Si, si –voltea los ojos. –Lo sé, Ángel caído de 4ta. Igual tú lo eres para mí. Siempre estás cuando te necesito pero, ¡me estresa que me cuides o protejas de más! Por dios si hasta Gi le dan ganas de estrangularte cuando te comportas como si fueras el papá de ella. ¡Le estresa que la tengas en una caja de cristal! ¡No somos de porcelana, somos de carne y hueso!
–Solo quiero que estén bien siempre. Aparte tú y mi novia –sonríe al decirlo ya que le llenaba de felicidad–. Son demasiado... Cuál sería la palabra... Ingenuos y distraídos, Más ella eso está más que claro, pero siempre tenemos que andar de cuidado con ustedes porque si no... Ya los hubiera arrollado un camión.

¿Por qué siempre tienen que salir con eso?

–Aparte las cosas no están tan buenas como para...
–Sigues con eso y meteré tu cabeza en el jacuzzi hasta notar que tu cuerpo no tiene fuerza.

Jev sonríe y pregunta:

–Bien ya. No diré nada al respecto pero... ¿por qué no me habías dicho lo de tu profesor y tú?
–Es complicado, ¿sabes?
–Entiendo, no tanto el problema que sea un chico, ¿sabes? Si no entiendo y también me molesta que sea mayor que tu, no lo conozcas totalmente y sobretodo que sea tu maestro. Eso pudo los pudo perjudicar si se enteraran.
–Lo sé...
–¡Al menos no se acostaron! –ríe. –Si no...

Al decir eso las mejillas del chico se tornaron totalmente rojas y Jev cambió su expresión de risa a sorpresa y miedo. Comenzó a negar con la cabeza boquiabierto.

–Ay no..., no me digas que tú y ese estúpido...
–¡Hay que salir! –interrumpió mirando su reloj.

Por otra calle de Woods-lake, John proseguía a despedirse de Liz que estuvo con ella todo el tiempo restante en su casa pues sus padres llegarán en un momento.

–¿Estarás bien?
–Si –murmura.
–Bien, cualquier cosa que necesites pequeña yo...
–¿Cómo me llamaste?
–¿Eh?
–¿Cómo me llamaste? –repite con brusquedad.
–¿Pequeña..?
–Como se te ocurra llamarme así, ¡te arranco la cabeza! ¿Entendido?

WHO IS THE NEXT? (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora