Un Nuevo Comienzo [Carlos De Vil]

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Narra Beth:

Esta semana todo iba bien, Mélanie se había hecho mejor amiga de Mal, Jordan es amigo de Jay y trata de conquistar a Evie, y Brandon se acerca más a la familia real.

Cualquiera de estos días Jordan le romperá el corazón Doug, acariciaba la cabeza de mi gatito, Figaro había crecido mucho ya que cuando lo encontré era muy pequeño. En mis muslos tenía mis libros y cuadernos, tenía que estudiar para una exposición junto con Audrey.

Hoy era viernes, solo estudiaba, Melanie se fue con Evie, Mal, Jane, Audrey y Lonnie. Ella por así decirlo era popular. Tocaron mi puerta, yo mire extrañada la puerta, no esperaba a nadie, deje por un lado mis libros y cuadernos.

-¿Evie?, pregunte extrañada.

-Beth, oye saldremos, te invito, dijo con una sonrisa.

-Me gustaría, tengo que estudiar.

Ella me miró obvia.- Beth es viernes, puedes estudiar otro día.

-No puedo, será luego.

No me gusta salir y menos por que es parte del plan, nadie sospecha de nosotros y pronto, nos vengaremos, sin importar nada.

Volvieron a tocar la puerta, yo solté un bufido de pereza, y me gire para abrir la puerta.

-Evie que no quiero salir, dije inmediatamente cuando abrí la puerta.

-¿En serio soy tan hermosa?, pregunto divertido.

Alze la vista, y sonreí.- Ah Hola Carlos.

-Entonces me voy, no quieres salir, se giro.

-Espera, ¿a donde vamos?

Sonreímos.

《...》

-¿Vamos a escapar?, alze mi ceja divertida.

-Solo sígueme.

Tomo mi mano y sonreí, ambos empezamos a correr por el césped, después algo timido entrelazó nuestros dedos.

Rendido en tus pies.

-¿Quieres ir al bosque?, pregunte divertida.

-¿No te parece?, me sonrió.

-Tal vez, me acerque un poco a él.

Volvimos a correr, y entramos a un pueblo y nuestros pies se encontraron con las baldosas detalladamente.

-¿Haz probado un helado?, me pregunto y el alzó una ceja.

-No.

-Yo tampoco. Soltamos una risa.- ¿Vamos por uno?

-Suena bien.

《...》

-Esto sabe delicioso.

-Opino lo mismo.

Carlos alzó la cuchara y la acercó a mi boca. Yo sonreí de lado y alze ambas cejas.

-Ay vamos no pasa nada. Abrí la boca y probé el sabor a chocolate.

Mordí el plástico de mi cuchara, y el me miraba atento.

- ¿Que tanto me ves?. Recargue el peso de mi cabeza en mi mano.

-Recordaba la vez que te vi. Desde la isla, eras fría. Haz cambiado. Puedo ver tu sonrisa todo el tiempo.

Sonreí.

-Ves. Sonrío.

Intercambiamos miradas.

Él está hechizado; no siente nada por ti.