Capítulo 8

104 10 2
                                    

Color verde: Es el color de la sanación en general. Es el color, que buscamos instintivamente cuando estamos deprimidos o acabamos de vivir un trauma. El verde nos crea un sentimiento de confort y relajación, de calma y paz interior, que nos hace sentir equilibrados interiormente.

Color rojo: El rojo simboliza el poder, la acción, color al que se asocia con la vitalidad, la ambición y la pasión.
En todas las culturas es el color de la sangre, el fuego, el amor, el erotismo, el sexo, la pasión, al placer... Es muy atrevido, por ello se utiliza en todos los ambitos para llamar la atención.

Finalice mi relato con trazos debiles, tratando de recabar nuevamente en mi memoria para recordar algun detalle del sueño que hubiese pasado por alto.
Habia decidido escribirlo en mi cuaderno de notas que hacia veces de diario intimo para intentar recrear en palabras aquel perturbador sueño que no me dejaba en paz. Incluso llegue a buscar informacion acerca de los colores que se habian quedado pegados en mi retina, y me lleve una impactante sorpresa al descubrir como mi desconsertante subconciente habia hecho cohincidir en detalle lo que ambas mujeres representaban para mi.

En mi solitario cubiculo solo podia pensar en ellas.

¿A quien engaño? Mis pensamientos estaban concentrados en Georgina, a quien no vi aquella mañana.
¿Sería por eso que el cielo me parecia mas gris?

Garabatee algo en el margen del cuaderno, tan absorto en mis reflexiones que no pude evitar sobresaltarme al sentir dos suaves golpecitos en mi escritorio, haciendo que algunas hojas que estaban frente a mi cayeran absurdamente al suelo.

-Lo siento, no quise asustarte.

-Lo siento, no quise asustarte

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"Hannah" susurre sin aliento. Esperaba en vano que no lo hubiese notado.

Se agacho junto a mi para ayudarme a recoger el lio que mi torpeza habia provocado, ubicándose tan cerca que su perfume caracteristico invadio cada uno de mis poros. 

-Menudo desastre causé- dijo entre risas. Risas que fueron musica para mi depresiva existencia.

-No te preocupes, fui yo el que estaba distraído.

Me miro de reojo con dulzura, y mi corazón le correspondió con unos fuertes e irregulares latidos.
Luego de acomodar las hojas en una pila medianamente alta se quedo en cunclillas observándome en silencio, cuestion que tuve que estupidamente interrumpir.

No me malinterpreten, estaria encantado que establecieramos aquel indescriptible y particular contacto visual a todas horas, pero justamente al no ser algo rutinario, me llamo la atención a que se debia su curiosa postura.

Además rara vez pasaba por mi cubículo, para no decir nunca.

-Disculpa-dije con la garganta repentinamente seca- no quiero sonar maleducado, ¿pero te puedo ayudar en algo?

-Oh, si- respondio incorporandose, y con las mejillas un tanto enrojecidas.- en realidad vine a pedirte ayuda. Se me ha roto un programa de la computadora, y no quiero molestar a algún técnico por algo que seguramente es una estupidez.- rio un tanto nerviosa, cosa que me pareció adorable- les he preguntado a los demás pero ninguno tiene idea, asique queria saber si podrias echarle un vistazo. Quizás tu sepas que le sucede.

The Deal (Castiel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora