Peligro en los Suburbios

Capítulo 2: Gallinas y patas de pollo.

Mi hermano y yo ya nos hemos alistado para irnos a la casa de los Wood, estos son un par de gemelos alocados que han organizado un fiesta para despedirnos del veranos y decirle "hola" al comienzo de las clases en la universidad.

Yo estudio para ser actriz y mi hermano estudia matemática aplicada, es un genio en eso. Mi padre nos ha dejado la casa en nuestras manos hace un tiempo, hasta ahora vamos muy bien.

Salgo de mi habitación para ir a la Max. Toco unas tres veces pero este no abre la puerta, lo que me hace girar la perilla y abrirla yo misma.

Al entrar pude ver a mi hermano, quien estaba decidiendo qué camiseta usar, si una roja o una azul.

- ¿Tu que dices? - Dijo mostrándome la camiseta roja colocándosela sobre su pecho desnudo.

- Cual sea está bien, yo no tardo tanto tiempo en arreglarme - Comenté mientras me sentaba sobre su cama.

- Creo que me pondré mi clásica camiseta negra. Espera, ¿y si me voy sin camiseta? - Preguntó y no pude evitar reír.

- De ir puedes, pero te dará muchísimo frío.

- Tienes razón, veré que me pondré.

- De acuerdo, te espero abajo - Dije saliendo de su habitación y luego ir escaleras a bajo.

Junto a la puerta principal hay un pequeño espejo con borde dorado, me coloco frente de él y arreglo un poco mi melena rubia.

Suena el timbre de la entrada, esto me hace quitar la vista de mi reflejo. Doy un paso al lado para tomar la perilla, girar la y abrirla.

Al hacer esto me he encontrado del otro lado de la puerta a Aaron Parks uno de nuestros vecinos.

Mierda.

- Ho- hola, Aaron - Dije tartamudeando, ¿en serio? ¿justo ahora tengo que tartamudear?

- Hola... Ehm, ¿Max? - Dijo dudoso. Bien, Aaron Parks no sabe ni mi nombre, genial. Esto no pasa en las historias, solo esto me pasa a mí.

- No, no. Yo soy Alex, Max es mi hermano, y es un chico...- Dije tratando de aclarar la situación. - ¿Necesitas algo?

- Oh, entiendo Alex. Sí, ¿tu hermano estudia matemática aplicada, verdad? Lo he visto un par de veces en la universidad en las aulas de geometría y demás.

- Sí, así es - Me arregosté un poco al marco de la puerta para tratar de dar la impresión de estar "relajada".

- ¿Crees que tu hermano le podría dar unas pequeñas clases a mi prima? De verdad que necesita ayuda.

Muy bien, este chico sólo quiere un pequeño favor. Mi hermano y yo nunca habíamos hablado con él, solo unas cuantas veces en la universidad o en reuniones que el mismo vecindario realizaba.

Pero nada más. Vamos, no creo que a Max le moleste dar unas pequeñas clases... Ahg.

- Los padres de mi prima están dispuestos a pagarle a tu hermano, Alex. Por favor, de verdad necesita ayuda. - Dijo Aaron haciendo un pequeño puchero.

- ¡No pongas esa cara! - Dije entre unas cuántas risas.

Aaron también dejo escapar unas risas - Vale, Alex.

- ¿Cuánto piensan pagarle a mi hermano?

- Me han dicho que unos 300 dólares por cada clase. Sólo necesita cuatro clases.

¿¡300 dólares!? Lo lamento Max, pero así no quieras necesitas el dinero.

- Oh, entiendo. Bueno, estoy segura que mi hermano estaría encantado de ayudarlos - Le sonreí - ¿Cuándo inicia con las clases para tu prima?