Enamorada de el

capítulo 40

A veces la vida puede darte golpes muy duros, y bueno eso yo ya lo tengo en claro.

La escuela transcurre normal, lo típico, clases lentas, maestros con muy mal humor, y muchos alumnos con la esperanza de que las vacaciones lleguen ya. Estoy en mi tercer semestre de preparatoria.

Me encuentro con Frank y Sue, estamos en una pequeña banca en los alrededores de la escuela.

Ellos platican, eso creo mis auriculares me impiden escucharlos.

Los observo detenidamente, desde la muerte de Gerard, ambos están al pendiente de mi.

Cada mañana Sue me despierta con una llamada o un mensaje, de como estoy. Y cuando no e llegado a contestarle, manda a Frank para que vaya conmigo.

Ese es un detalle que realmente agradezco.

Las navajas, siguen siendo mis amigas. Papá me pagó un psicólogo, de hecho voy los martes y viernes por la tarde.

Ya han pasado 2 meses desde la muerte de Gerard, y la verdad lo sigo extrañando. El tal vez sea la primera persona que se acercó a mi por gusto y no por interés e hipocresía.

..........

- ¿como te has sentido Sofia? Él psicolgo pregunta con cautela

- me siento bien

- ¿puedes mostrarme tus brazos?

Doblo las mangas de mi suéter hasta la altura de mis codos y le enseño los brazos.

- ¡por dios sofia! ¿Como puedes estar bien? Tienes cortes nuevos. Esto ¿es por Gerard?

La pregunta me aturdió, respire hondo y trate de centrarme en la respuesta a su pregunta.

- no. No es por Gerard, es algo estúpido sabe, yo no quiero hacerlo, yo estoy bien, tengo amigos y una familia, pero luego recuerdo todo, mis fracasos, mis fallos, mis errores, me siento jodidamente mal, aun recuerdo a Gerard, pero ya no me pongo triste, al contrario cada que lo recuerdo sonrió, según Elizabeth Bishop "él arte de perder, no es difícil de dominar" viéndolo desde esta perspectiva, por que lamentarnos por una muerte, ya que esta es algo que llega de manera natural, aparte es una fase de la vida, se que desde donde Gerard esté, no lo gustaría verme aquí.

Cheque mi reloj, di un largo respiro, cerré los ojos y pase saliva

- es hora de que me vaya. Nos vemos en la próxima sesión, que tenga buen día

Me levante del sofá, y camine con lentitud a la puerta, tome él picaporte, y volví a mirar al doctor.

Salí corriendo prácticamente de ese lugar.

Llegue a casa, pero sinceramente, no tengo idea de que hacer.

¿Alguna vez se han sentido como una jodida mierda?

Bueno, pues esa era yo, intentaba leer él libro que tenia en mis piernas, pero simplemente no me lograba concentrar.

Tome mis audífonos, subí todo él volumen, me acomode en mi cama, y rápidamente caí en los brazos del morfeo.

.....≧﹏≦.....
2 años después.

Él espejo no podía mentir, estaba echa un desastre, hoy seria mi graduación.