-Concentrate
Escuchó la voz de su novio con el que estaba desde ya hace casi un mes. Estaban en su cuarto, ambos sentados al lado del otro con un montón de cuadernos sobre el escritorio, pegados codo con codo. Después de varias peticiones A-ya había accedido a que C-ta le ayudara a estudiar, aunque no sabía porque era necesario, no era malo en la escuela, estaba como la mayoría , aunque obviamente mucho más abajo que las calificaciones de C-ta. Pero después de varias insistencias, terminó por aceptar.
-Estoy concentrado - le respondió ya molesto; estresado por tanto estudiar y enojado con C-ta que no ayudaba interrumpiendolo.
-No, no lo estás - le dijo con un tono divertido en su voz
A-ya decidió pasar por alto los intentos de C-ta por molestarle y concentrarse en el ejercicio que tenía en frente.
Habían pasado poco más de dos semanas desde la vez que tuvieron su primera cita en el cine, y desde allí la cosas estuvieron bastante bien, una relación agradable, ambos disfrutaban de pasar tiempo con el otro, aunque aún tenían ciertas cosas dentro que no podían sacar, pero se compensaba con estar juntos.
Varios de los exámenes finales habían pasado, pero quedaban dos, y hoy estaban tratando de vencer la materia que más le complicaba a A-ya: matemáticas. Pero claro, era difícil intentar enfocarse en el ejercicio que C-ta le había hecho en el cuaderno que tenía en frente, mientras que A-ya podía sentir la mirada penetrante de al lado. Y continuaba y continuaba. Y podía sentir como tenía pegados sus ojos a unos centímetros.
-Que si, estoy concentrado, C-ta - le repitió
-¿Entoces por qué no has realizado el ejercicio?
A-ya suspiró
-Tal vez podría concentrarme más si no estuvieras mirándome tanto
-¿No te puedo mirar?
-No, estoy tratando de enfocarme -le dijo exhausto, A-ya miró a la cara a C-ta, se podía ver claramente una sonrisa de burla en su cara, él trataba de transmitirle toda su exasperación por medio de su cara de molestia.
-No creo que logres hacer mucho si mientras te explicaba el ejercicio no parabas de observarme - le dijo con una sonrisa, provocancolo.
-No te miraba - se defendió A-ya con un ligero rubor en sus mejillas.
-Si lo hacías - C-ta riendo se pegó a este en un cariñoso abrazo pegando sus caras.
A-ya no le correspondió este, estaba cansado, frustrado por los exámenes, enojado por estar estudiando cuando nunca lo hacía, y que C-ta sólo estuviera molestandolo. Se soltó del fuerte abrazo de este, se levantó para dirigirse a su cama y se tiró en ella, exhausto de todo y exhausto de nada.
Respiro profundo y cerró sus ojos, tratando de relajarse. Y por un momento pensó que llegaría a quedarse dormido, de no ser, por que sintió y suave y ligero contacto apoyado sobre sus labios durante unos breves segundos, un sentimiento que aún sin esperarlo y sin ver, reconocía, y hacia que le diera un salto a su corazón. Abrió los ojos, y se encontró con C-ta sobre él con una sonrisa mirándolo detenidamente.
-¿Qué pasa?- le preguntó A-ya
C-ta se apoyó su cabeza sobre el pecho de A-ya todo su cuerpo sobre él. El menor sintió el peso, pero luego se acostumbró y pudo respirar más relajado.
-¿Terminamos las sesiones de estudio? - preguntó C-ta concentrado en el como el pecho se A-ya subía y bajaba junto con su cabeza apoyada encima y escuchar como latía su corazón; fuerte, rápido.
