Pájaros volando

Capítulo 1: La prisión.

Más grande que las dos torres gemelas, una puerta hecha de un material irrompible con grandes aldabas...

Detrás de esta puerta vigilando sin descanso, unos soldados contemplan las flores sin vida.

Una playa privada, una caja fuerte echa del mismo material irrompible, con cuatro acertijos que solo saben mi madre y mi padre, un perro guardián llamado “Kei” hay muchas cosas en esta mansión, me tomaría una eternidad explicarlas una por una.

Mi nombre es Yuna, vengo de una familia adinerada, Los hasekura, vivo en una isla llamada sokuro, nadie sabe de esta isla ya que no esta en el mapa de Japón además de que esta cubierta por un vidrio especial que no es visible para los que la ven desde afuera. Mi padre junto con mi madre usaron parte de su dinero para crear esta isla, yo soy la única de todos los que viven en esta mansión a excepción de mis padres que sabe esto. Esperan que herede algún día este lugar, o más bien esta prisión.

July: princesa su cabello están hermoso ¿Cuándo cree que empiece a nevar?

July es una de las mil sirvientas que habitan esta mansión, de todas ella es la que mas se preocupa por mí.

Yuna: seguro que cuando veamos una gota de nieve cayendo del cielo,

July: sabe ya va siendo hora de que baje a desayunar. Deje que la ayude.

Yuna: July me puedo vestir sola, no soy una niña.

July: es cierto, mañana cumple 15 años, como pasa el tiempo, al menos déjeme cepillar su blanco cabello.

Yuna: de acuerdo, tienes mi permiso.

July: espero poder seguir viendo esos ojos color verde y azul oscuro.

Yuna: ¿No crees que sea raro tener los ojos de diferente color?

July: como yo lo veo, princesa, muchas gente desearía tener esos ojos, sobretodo los de color verde. Las personas nacemos de distintas maneras y pensamos distinto, pero en algo podemos estar de acuerdo, vinimos a este mundo y no somos iguales espiritual ni física mente por una razón. Hasta que no sepas la respuesta debes cuidarlos como si fueran un valioso tesoro.

Yuna: mi valioso tesoro. (Tocándose el ojo verde) Te lo prometo los cuidare mucho.

July: se que asi será. Bien es hora de bajar, tus padres te están esperando.

Yuna: si.

Nunca voy a entender, porque nuestra mesa tiene que ser tan grande, solo somos mi madre, mi padre y mis tres hermanas, no lo entiendo.

Yuna: buenos días, madre, padre.

Carlota: buenos días princesa Yuna.

Hiro: buenos días princesa Yuna. ¿No vas a saludar a tus hermanas?

Cuando veo a mis hermanas solo me siento como una extraña hay veces en las que me pregunto si de verdad soy una de sus hermanas.

Yuna: buenos días Asuka, Miu, Sayaka.

Azuka: buenos días, princesa Yuna.

Azuka es mayor que yo además de seria y es una persona muy refinada se parece tanto a nuestra madre, sobretodo sus ojos azules claros y su cabello rojo.

Miu: buenos días, princesa Yuna.

Miu, aunque parece un ángel, siempre me molesta, solo porque también es mayor que yo, se parece a nuestro padre, luciendo frente a todos sus ojos color verde claro.

Sayaka: buenos días, princesa Yuna.

Y la ultima de mis hermanas Sayaka, es una persona que haría lo que sea contal de que el dinero de la familia estuviera en sus pies, pero no se mete conmigo ya que yo no soy competencia para ella.

Odio sentarme en esta mesa. Preferiría ir con las sirvientas, felices desayunando en la terraza.

Yuna: gracias por la comida.

Carlota: yuna ve a vestirte tu profesora de arte vendrá hoy a las 9:00, tienes una hora para estar lista.

Yuna: no te preocupes madre, estaré lista antes que llegue.

Mi profesora se llama Sora pero cada vez que cometo un error en la pintura, me pega. Sus uñas son como espinas que se ase acercan sin ser llamadas.

Mis padres no me creen que hayan contratado a la profesora más cara de todo el mundo no significa que sea buena. 

Me empezaron a salir las lágrimas por los ojos.

A veces quisiera escaparme, pero la seguridad de aquí es impecable e impenetrable.

Yuna: ¡Dios! quiero salir de aquí, no quiero volver a vivir...la misma pesadilla de todos los días.

Sayaka: pobre hermanita ¿hay algo que pueda hacer por ti?

Yuna: ¿sayaka? ¿Hace cuanto tiempo que estas parada hay?

Sayaka: llevo un buen rato escuchándote, no soy de preocuparme por los demás pero si de verdad quieres irte yo te puedo ayudar.