-Repite lo que has dicho- con suerte habria sido una mala jugada de su cerebro.
-Que te cases conmigo- repitio colocandole un mechón de cabello tras la oreja.
-Vale, a parte de que sere un desastre como esposa y como madre, ¿no somos algo jóvenes?- sin motivo aparente el empezo a reirse.- ¿Ahora que te ha dao?
-Nada, "esposa horrible", puedo esperar no he dicho nada de casarnos ahora. Puedo esperar, es una petición a largo plazo.
-¿Que soy una cuenta de pensiones?
-Podria decirse que si. Deberías descansar, ya sabes has salido hace poco del hospital...- era mejor dejar el tema porque cabía la posibilidad de un sí, pero también cabía la posibilidad de un no rotundo.Los días siguientes fueron tal caos que la rubia no tuvo ni tiempo para pensar que iba a hacer respecto a la proposición de Noel, el regreso a la universidad tampoco fue nada relajado el trabajo se le acumulo y ahora no tenía ni un minuto de libertad.
-Muy bien ¿podemos descansar?- le pregunto a la morena de pelo negro y ojos castaños delante de ella.
-Barbie, tienes que ponerte al día- la regaño.- no quiero que por una chorrada pierdas el ritmo de clases.- por cosas como esa aquella chica era su amiga, no hacía preguntas incomodas y le importaba poco de donde venía de lo unico que entendía era del hoy y del mañana.
-Noel me ha pedido matrimonio- una noticia como esa podía eclipsar cualquier cosa y evidentemente en ese momento lo hizo.
-¿De que te extraña?- la miro sería mientras dejaba de lado los apuntes.- es lo que pasa cuando llevas un tiempo con alguien y le quieres, pues que quieres pasar tu vida con esa persona. Deberías estar contenta al menos tienes a alguien así.
-Ya claro... Como no eres tú la que tiene que decir si o no- rodó los ojos.
-Le vas a decir que sí, a fin de cuentas le quieres y estar prometida puedes estar bastante tiempo.- siguio mirando sus apuntes- por cierto si querias guardarlo en secreto tarde ese chico lo ha oido todo.- la rubia miro donde señalaba.
-No era mi intención escuchar- la chica se sobresalto.
-¿Desde cuando estas aquí? Y mejor todavía- se dirigió a su amiga- ¿Como lo has visto?
-Es una persona no encuentro ningún motivo para no verle- la pelinegra seguía metida en la lectura.
-En serio a veces te metería en una caja y te mandaría a la Atlántida- suspiro- Tetsuya esta es mi amiga Tamara o como yo la llamo Tamy.
-Un placer conocerte- dijo el peliceleste con su tono monotono.
-El placer es mío, Tetsuya- dijo con una sonrisa la pelinegra que se encontraba guardando sus apuntes.- Sí no os importa tengo que hablar con el decano, luego nos vemos.- la chica dejo a ambos solos.
-¿Que querias?- pregunto directa, era raro que el jugador fantasma se encontrará allí para hablar con ella.
-Creo que a Leyna-san le pasa algo, ultimamente esta muy rara.- explico- como eres chica a lo mejor a ti te lo cuenta.
-Sony también es su amiga- levanto la ceja con cara de duda.
- Pero en el caso de que la solución sea extrema tú se lo diras a la cara.- le saco una carcajada a la rubia.
-Bonita manera de decir que si le tengo que pegar un puñetazo yo lo haré.Mientras los clubes se reunian Bárbara se dirigía a casa de Leyna, más que por hacerle un favor a Kuroko era por curiosidad, ademas no le venía mal aquello para sacarse de la cabeza la respuesta a su novio.
-Buenas tardes, Ley- la peliblanca estaba con ropa comoda y descalza- ¿Me vas a dejar pasar?
-Claro- la dueña de la casa seguía algo sorprendida por la inminente visita de la novia de su amigo.
-Muy bien ahora ¿Que te pasa?- se sento en el sofa poniendo los pies encima de la mesa, si hubiera estado por ahi cierto peliverde seguro que la regañaba por eso, pero no estaba y Leyna no estaba pensando precisamente en si la mesa se le ensuciaba o no.
-No me pasa nada.- miro incómoda a otro lado.
-Claro, y yo soy Scarlett Johanson- bajo las piernas, se notaba que estaba mal y que el tema era bastante peliagudo.- Cuéntamelo te juro que no se lo dire a nadie.
-A lo mejor no es nada..- suspiro, y por fin lo contó- Llevo demasiadas noches soñando con Akashi, sueños un tanto subidos de tono.- se hubiera estado bebiendo algo sin lugar a dudas lo habría escupido.- Lo peor es que me gusta lo que sale en los sueños...
-¿Por qué elegiste a Midorima?- una pregunta directa.
-Porque, pensé que era la mejor opción, joder, sé que le quiero.- iba a llorar, la presión de ocultarle aquello al chico de las lentes era mucha.
-Mira no soy un genio en esto del amor, pero a lo mejor necesitas un tiempo lejos de Midorima y de Akashi, ya sabes Leyna, te despejas y vuelves con una idea clara.
-Pero no quiero eso...- suspiro- no soy débil puedo con esto, pero Akashi no para de insistir por un lado y...
-Puede ser que te guste, pero una cosa es gustar y otra querer...- que se podía decir en una situación así, ¿deja a Midorima coge las putas maletas y largate?- Ley, en serio tienes que alejarte de tanta presión...
-¿Tu que harias en mi situación?- pregunto.
-Nunca me lo he planteado, sonará ñoño pero quiero a Noel, aunque eso no quite que pueda mirar a otros chicos, ninguno de esos chicos me ha gustado lo suficiente- penso un rato- mejor dicho, nunca he conocido a esos chicos como para que me llegaran a gustar, tu problema es que conoces a ambos y ambos tienen algo que te gusta.La charla con Bárbara le quito un muerto de encima, aquella noche Shintaro no volvía a casa puesto que estaba reunido con el equipo, le venía bien aquello claro que nunca imagino que el mismísimo culpable de todo se presentaría delante de su puerta.
-¿Que haces aqui?- pregunto pero el tono no sonaba tan amenazador como de costumbre.
- Visitarte, estoy lesionado y ya sabes, que mejor que ver a mi emperatriz- se miraban fijamente, la tension se podía cortar con un cuchillo.
-Vete, Seijuro, por favor- era la primera vez que Leyna le hablaba así.
-Leyna, mi emperatriz, creo que estas empezando a comprender que eres mía- la beso, lo que ocurrió aquella noche propicio que la vida de todos los allegados a aquellos dos se tambaleara.-¿Tienes una respuesta?- preguntó el pelinegro jugueton.
-Me estas presionando demasiado- contesto ella con el mismo tono.
-Quiero saber si voy a tener que buscar a otra dispuesta a vestirse de blanco para mi.- ella se empezo a reir.- encima ya tengo hasta el anillo.- el chico le enseño la alianza que reposaba en una cajita sobre una mesa, aquel anillo de rubi y diamantes.
-Noel, la boda para despues de la graduacion y solo si estamos dispuestos- condiciono.
-Estoy tan seguro que no te he llevado a las Vegas para que nos case un Elvis porque tu te habrías enfadado conmigo.- cogio el anillo y se puso de rodillas mientras cogía la mano de la rubia- las cosas se tienen que hacehacer bien.-Se aclaro la garganta- Barbara Good, ¿quieres que me convierta en tu insoportable, impredecible pero no obstante sexy marido?
-Sí, insoportable, impredecible y sexy prometido.- el chico le puso el anillo, feliz y a continuación la beso.
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Try
FanficUna cosa tenía Leyna clara cuando se quedó en Japón, y era que no duraría más de tres años en el país. Para suerte o desgracia había hecho una predicción que estaba empezando a cumplirse. Segunda parte de I can't be tamed.