Mi problema

4K 242 66
                                    

Algo que verdad odiaba era que lo notaran primero a él.
No solo mis padres, en el colegio el sobresalía más que yo, tenía muchas amistades, era el preferido de todos, él era lo contrario a mí.
Ambos nacimos en una familia adinerada, él era mayor por 3 años, si tan solo hubiera nacido antes, yo sería el favorito de todos, lo odiaba pero lo quería tanto, después de todo era mi hermano. Mis padres solían darle preferencia a él, decían que él era mayor y más responsable que yo, eso no era verdad, sin que mis padres lo notaran el solía meterse en muchos problemas, podría aprovechar para al fin sobresalir más y ser al menos el favorito de mis padres, lamentablemente como ya mencione antes lo quiero demasiado.

El despertador sonó, otro día mas, seguramente sería igual a todos los anteriores, despertar ya no me emocionaba tanto, deseaba poder quedarme en cama y dormir hasta cansarme. Lamentablemente no era así, mis padres me mandaban al colegio, ellos iban al trabajo y Ace... el pues él iba a la universidad.
No tenía muchos amigos ya que cuando conocía a alguien y le presentaba a mi hermano, terminaban por ser amigos de él, mis padres decían que tenía cierta simpatía que yo no, no lo decían por hacerme sentir mal, decían que un día de estos me enteraría de todo lo que sucede a mi alrededor, cuando deje de preocuparme por mí mismo.

Imposible -me dije a mi mismo- es obvio que si no le importó a nadie por lo menos me importare a mí mismo -ese era mi pensamiento, nada ni nadie lo cambiaría, al menos así me sentía querido-

Me duche y baje a desayunar, mis padres estaban ahí junto a Ace, ya estaban desayunando, bueno no me sorprendía ellos aprovechaban toda oportunidad para estar con el favorito de la casa.

Buenos días mamá y papá -salude con una gran sonrisa mientras me acercaba a la mesa-

Buen día -dijeron al unísono sin mirarme-

Tome asiento en una de las sillas vacías, para mi desgracia estaba frente a el- Ne... Ace ¿Quieres jugar conmigo esta tarde?

Lo siento Luffy, debo ir a casa de Marco a terminar un trabajo- tomo su vaso de jugo y bebió lo último que le quedaba-

¿Te sirvo más? -pregunto acercándose a el-

Claro, gracias mamá -sonrió, ella beso su frente y tomo el vaso, lo lleno de aquel liquido naranja y lo coloco donde estaba-

Mamá... ¿Puedes servirme jugo? -pregunte levantándome, ya sabía la respuesta, pero no perdía nada intentando-

Luffy, tienes manos y piernas sírvete por favor -tomo asiento al lado de aquel hombre que rara vez decía algo en el comedor-

Gracias mamá -sonreí- gracias por recordarme que tengo manos y pies

Al terminar el desayuno, ellos se marcharon al trabajo, se despidieron de Ace y después de mí. Me quede solo con él, no dijo ninguna palabra estaba ocupado en su móvil.

Ace... hace tiempo que no estamos juntos... -me interrumpió-

Lo siento Luffy voy tarde -tomo su celular y lo coloco en su oreja, tomo su mochila y bentou, sacudió mis cabellos y salió del comedor-

¿Solo? Qué raro... Me levante en busca de mi bentou, no estaba preparado, en la estufa había una nota que decía... preparar bentou para Luffy, era la letra de mi madre, quizá se le había hecho tarde.
No era muy bueno en la cocina, así que decidí ir sin mi almuerzo, compraría algo en la cafetería, con el dinero que me había dado... no me habían dado dinero hoy, estaba realmente molesto, aunque la situación en mi casa ya era normal, todos los días vivía lo mismo, no tenía caso molestarme o reclamar nada cambiaria, y no lo decía por resignarme si no porque ya no había intentado tiempo atrás.

¿Hermanos O Enemigos?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora