capítulo 8

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Leyra

Todos se han ido a dormir. Al parecer los padres de carlos estarán de viaje una semana así que en la casa solo estamos Hanzel, carlos y yo.

Me dieron una habitación de huespedes, pero yo desearía estar en la habitación de Hanzel cuidandolo.
De hecho quisiera hacer algo más que cuidarlo.

Tengo que admitir que Hanzel es muy guapo y no ha tenido novia nunca, pero sería muy injusto para mi dejarlo enamorarse de lo que soy, una ilusión. Porque eso es lo que soy y lo que siempre seré.

Da igual... voy a morir.

Salgo de mi habitación y cruzo el pasillo. La puerta de Hanzel está abierta y rechina. El ruido parace despertarlo porque la luz se enciende.

- eh, hola... no puedes dormir?- pregunta incorporandose. La sabana se cae y deja al descubierto su torso...

- no, y tú?- respondo yo. Me quedo parada en la entrada dudando si ir a su cama o salir.

-No, tampoco- creo que nota mi indecisión- ven aquí

Da palmaditas a la cama y yo camino hacia él. Me recuesto a su lado y quedamos frente a frente.

Él me mira mis ojos y mis labios alternativamente y se por esa acción que quiere besarme.
La ventana esta abierta y entra una corriente de aire frio que me hace acercarme a él en busca de calor.

Al principio él se tensa, pero despues me acerca un poco más a él. Nuestras narices casi se tocan.

- quieres besarme?- le pregunto, animandolo a hacerlo.

- nunca e besado a nadie...- admite algo avergonzado

-Sólo a mi- respondo recordando aquella vez que me adentre en sus sueños.

Me acerco y rozo sus labios con los mios. Una corriente electrica me recorre al contacto. Sus labios son tan suaves y tibios. Comienzo a besarlo, nuestros labios moviendose a una sincronía perfecta. Llevo mis manos a su cabello y tiro un poco de él. En respuesta el gime en mi boca y tengo que admitir que eso me gusta.

Profundisamos el beso y nuestras lenguas danzan. Él se coloca arriba de mi. Una de sus piernas entre las mias y sus manos a mis costados.

- quieres hacer esto?- pregunta alejandose un poco para mirarme

En respuesta coloco mi mano en su erección. Gime y vuelve a colocar sus labios en los mios.
Calor, tengo mucho calor.
Siento esa electricidad en mi. Cuando me toca, cuando me besa... es tan intensa y me hace desear más. Adictiva.
Sus manos recorren mi cuerpo igual que sus labios.

Nos pasamos la noche así tocandonos, besandonos, y ardiendo en esta cama.

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Espero no les molesten estas escenas, soy fan de las historias no censuradasxD

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