9 semanas

766 77 7
                                    

Queridos Lucy, Edmund y Peter:

Ya nueve semanas... Cada semana escribo una carta pensando que así se pasará antes el tiempo. Al final no he podido ponerme ninguno de esos anillos. No he sido capaz de tocarlos si quiera. Hoy era el cumpleaños de Peter. Sus veintitrés cumpleaños. He ido a la pastelería a coger un pequeño pastel, como si fuera a celebrarlo con vosotros, pero evidentemente no es así. Os extraño tanto.

Hoy mi sueño ha sido más real, he estado en ese lugar llamado Narnia unos minutos, y os estaba observando desde una ventana y veía como hacíais los preparativos para una fiesta o algo así. Justo cuando iba a hablaros todo se ha tornado negro y me he despertado llorando. Era un sueño tan real, tan real. Ojalá no hubiera despertado. Una voz me dijo que aún no estaba preparada porque no creía en Narnia. Que aún lo seguía viendo como un juego de niños. Pero para mí fue tan real estar allí, tan real el oír vuestras voces...

Ya no sé qué hacer para volver a estar cerca de vosotros. Quizás, si me pongo los anillos pueda ir a donde estéis y quedarme allí para siempre. Quizás, solo necesite creer en que pueda volver a veros, aunque sea en un sueño, y no volver a despertar jamás. Hay tantos quizás...

Estoy cansada de estar sola aquí en casa, cansada de creer veros siempre que cierro los ojos, cansada de ni siquiera poder volver a hablar con vosotros si no es en sueños. Sigo aún con mis peleas internas, pero mi corazón anhela tanto el estar con vosotros que va ganando la batalla a mi cabeza. A lo mejor esa voz tenía razón cuando después me dijo que si hacía caso a mi corazón llegaría a la felicidad. Y creo que al final eso sucederá, aunque en el fondo aun piense que Narnia y todas esas historias sean cosas de niños. Pero por volver a estar cerca de vosotros y ser una familia como antes daría lo que fuera.

Hoy ya no puedo escribir más porque me ahoga la pena de haberme despertado de ese maravilloso sueño. Ojalá estas cartas algún día me sirvan de algo.

Se despide vuestra hermana mayor, la que os echa de menos y se arrepiente de no haber sido más comprensiva con vosotros.

Para mis queridos hermanos de su hermana que no os olvida,

Susan

Diario de Susan Pevensie, Reina Susan La BenévolaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora