Yes Daddy..

II

-Hola.. ¿Puedo pasar?

Sentía mis piernas temblar, no sabia exactamente si era por lo nerviosa que estaba o por emoción, Sonreí como si todo estuviera bien dejándolo pasar a mi departamento.

-¿Nerviosa?

Se da media vuelta y sonríe sarcástico, ahora se que ni siquiera puedo disimular, bajo la mirada bastante avergonzada, el tomó mis manos aún temblorosas.

-No entiendo porque.

-¿Bromeas? Tu eres una celebridad, eres demasiado famoso y yo soy tan "who" apenas estoy iniciando mi sueño, y sigo sin entender porque soy tu novia.

-Bueno...me gustas, y bueno eres preciosa, sencilla.

Me dirigí a la cocina y serví café en 2 tazas diferentes, estaba a punto de volver a la sala, pero Zayn estaba recargado en la mesa que estaba frente al refrigerador, tengo una suerte verdaderamente increíble, y me quede ahí parada con las tazas de café una en cada mano, sin decir si quiera una palabra, pensando en lo maravilloso que seria tener a Zayn a mi lado.

-¿Te ayudo?

Estaba frente a mi, dejando una taza en la mesa, volviéndose de nuevo  para sujetar la otra. Aprovechando para acariciar una y otra vez mis manos.

-Gracias

Sonreí tratando nuevamente de disimular esos nervios tan visibles que estaban en estos instantes.
Di un sorbo a mi café, llenándome de crema la boca, y sintiendo pena alguna.

-Deja que yo lo haga

Tomo una servilleta y la paso suavemente sobre mis labios, perdiéndose en ellos.
Dejó la servilleta a un lado de la taza de café y ahora rozó mis labios con sus dedos, un impulso en mi hizo que me acercara a el.
Me incline hacia el, apoyando me con mis codos, el sujeto mi cuello y con su otra mano, hecho mi cabello detrás de mi oreja.

-Eres mejor de lo que me imagine

Y sus labios tocaron los mios, era una combinación de besos y el sabor al café, puse mis manos sobre sus hombros y bajaron hasta su cuello, evitando que se separara de mi.

-Creo que es tarde, me tengo que ir.

Supuse que tenia razón, ahora todo estaba obscuro, excepto por unas pocas luces encendidas,  aún así los taxis no son una buena opción.
Negué con la cabeza y el me miro extrañado y devolviendo esa sonrisa sarcástica que si por mi fuera, jamas dejaría que se ocultara de su rostro.

-No puedes irte..bueno...digo es tarde y los taxis no son seguros.

-¿Esperas a que me quede a dormir contigo?

No era lo que quería decir y me sonroje con su pregunta, ¿Que responder a eso?
Ninguna maldita respuesta salia de mi, me sentí bastante patética. 

-Me quedare

Una gran presión se sintió en mi pecho, sentía mis mejillas arder, subí a mi habitación, con Zayn detrás mio.

-Supongo que puedes dormir aquí.

Señale la habitación mas cercana a la mía, ya hacia bastante tiempo de que nadie ocupaba esta habitación. Aún se podía apreciar un poco de polvo en los bordes de la ventana, la cama estaba perfectamente tendida, y tenia una iluminación adecuada que podría iluminar dos recamaras sin dificultad.

-Daddy va a dormir contigo esta noche.

¿Daddy?