LO SIENTOO, SÉ QUE LLEVO AÑOS SIN ACTUALIZAR, PERO ES QUE PERDÍ ESTA CUENTA, NO PODÍA RECUPERARLA Y ME RENDÍ, HASTA HACE POCO QUE LEÍ SUS COMENTARIOS, E HICE TODO LO POSIBLE PARA RECUPARARLA, Y AQUÍ ESTAMOS CON UNA NUEVA ACTUALIZACIÓN, CON CASI 2,600 PALABRAS COMO DISCULPAS, SI VEO QUE LA HISTORIA SIGUE RECIBIENDO APOYO VOY A SEGUIR ACTUALIZANDOLA.
UNA DISCULPA POR LA TARDANZA Y OJALÁ LES GUSTE EL CAPÍTULO.
Miré con odio el despertador unos segundos para después apagarlo y levantarme. Me dirigí al baño. Luego de asearme bajé, me preparé un desayuno rápido y al terminar subí a vestirme para ir al colegio.
Había pasado todo el día anterior, domingo, viendo películas románticas, y aunque no eran mis preferidas, no podía evitar imaginarme a Tom y a mi en su lugar y me fascinaba.
Al terminar de vestirme, con un pantalón cargo con apariencia deslavado, una remera negra mangas largas y encima una remera manga corta blanca, con un dibujo de una Blanca Nieves estilo dark, tomé mi celular y mi mochila para salir de mi casa para dirigirme al colegio.
Al llegar al colegio, fui directamente a mi salón, encontrandome con Andreas en nuestro lugar, como faltaba diez minutos para que comenzarán las clases oficialmente el profesor aún no había llegado.
Me senté al lado de mi mejor amigo quien de inmediato besó mi mejilla como saludo.
-¿Cómo estás?
-Bien, ¿y tú?
-Bien ¿Cómo está tu hermano?
-Ah, bien, se calló de la moto y se hizo unos cuantos raspones y se rompió el brazo, pero esta misma tarde le dan el alta.
-Genial. ¡No vas a creer lo que ocurrió ayer!
-¿Qué ocurrió?
-Cuando te fuiste, fui a comprarme un licuado, y en una mesa vi a Tom y sus amigos comiendo. Estaba por irme pero Tom me vio y me llamó.
-¿De verdad?
-Si, y quiso invitarme un licuado y al decirle que no, Bill lo compró y no me dejó devolverle el dinero.
-No me sorprende, todo el mundo sabe que Bill es muy bueno.
-La cosa es que después de eso, Tom me invitó a recorrer el lugar ya que yo había dicho que iba hacerlo. Y antes de nada, ahí encontré esto-saque de mi mochila una bolsa y se la entregue.
-¿Qué es?-tomó la bolsa.
-Abrela-abrió la bolsa encontrándose con el buso que le compre para Stella.
-¿Dónde lo encontraste?-preguntó observando el ticket de la compra.
-En una de las tiendas del shopping mientras caminaba con Tom.
-Cuentame qué más pasó con él-dijo mientras me pasaba el dinero del buso.
-Pues me regaló un oso de peluche, unos chocolates y me invitó al cine.
-¡No te creo!
Le mostré a Andreas las fotos que le tomé al peluche y a la caja de chocolates.
Antes de poder seguir hablando, el profesor entró al salón y debimos prestar atención.
-Todavía no puedo creer lo que ocurrió el sábado-dijo Andy una vez que ya estábamos sentados en el comedor, en la hora del receso.
-Yo tampoco, aún no me lo creo, y estoy super feliz.
