Tus besos son, literalmente como una droga, los probé una vez y ya no puedo dejarlos. Los necesito en mi día a día y cada vez necesito una dosis más grande. Se que me hacen daño porque un día ya no podré tenerlos y me volveré loca. Un día moriré de una sobredosis, y tu serás el culpable. Amo esta droga, amo sentir ese escalofrío que me recorré el cuerpo entero cuando te beso. No importa si muero, pero jamás dejare de drogarme con tus besos.
Sinceramente,
Tu novia, que admite que es una drogadicta.
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Besos Robados
Short StorySolías robarme sonrisas, hasta que te diste cuenta de que no te era suficiente y entonces decidiste, robarme un beso... Y ni siquiera con eso tuviste suficiente, así que me robaste el corazón.