Una serie de asesinatos: Asesinato en Battery Park

5. Una pista para el caso

**No está editado, lee: El Grupo de lo Imposible**

Todos callaron cuando dijo eso mi abogado, yo mientras estaba al lado suyo, mirando haber que tal lo hacia y vi como lo hacia, sin nervios, manteniéndose firme como una roca y todo eso, y bueno era un juicio muy frustrado y con mucha frustración en ella.

Entonce siguieron el juicio por que no había otra opción:

–  ¿A sí?- preguntó el Fiscal- si tanto sabe ese tal Steven pues que venga a este tribunal, alguacil, llama a ese tal detective Steven

– Sí –dijo el alguacil

Vino el alguacil durante unos cinco minutos de espera y de minutos que todo el mundo se aburrió como una ostra, y bueno supongo que le habrá encontrado en su despacho o en su casa, al final de esos minutos pequeños

– Steven, jura decir la verdad, solamente la verdad, y nada más que la verdad

– ¿Me lo dice o me lo pregunta señor juez?, la pregunta sería si usted esta preparado para escuchar la verdad

– Sí, supongo

– Bien, esto es lo que pasó su señoría: Hace cuatro días y nueve horas antes del asesinato de la mujer de Samuel, mi cliente, también pero en otra cosa y en otra cuestión, me mandó que investigara el caso y yo le dije que sí, el me lo contó todo lo que supo, pero el es la víctima de todo esto, pero sé que mi cliente, aunque haya encontrado una pista contra él que le culpase de todo esto y le llevase al caso este, sigo creyendo que es inocente, y lo misterioso de todo esto es que encontré en la cara de su mujer un rostro muy expresivo, y con esto quiero decir que su mujer-dijo señalándome a mí – conocía al asesino, y supongo que su pregunta será que como sé lo de la cara, ¿me equivoco?

–  No, no falla ninguna Steven-dijo Óscar

– Por la cara que puso Silvia antes de morir, era horrible, una expresión indescriptible, esa cara nunca la olvidaré nunca en mi vida señor juez, era una cara de horror, como si conociese de pies a cabeza a la persona, o como si la hubiera visto alguna vez en su vida, pero no olvidaré su cara

– Vale, ya me lo imagino no hace falta hacer que describa todo o sino me darán ganas de ir al baño de inmediato

– Entendido, si me permite Steven comenzaré mi interrogatorio

– Bien, comience su interrogatorio Óscar-dijo Steven quitándole las palabras al juez

– Bien, gracias, bueno mi pregunta es quien es esa persona y si está en este tribunal  en estos momentos

– No lo sé, de momento lo estoy averiguando, pero le aseguro  que algún día cogeré al asesino de mi cliente, y se le llevará a justicia y será juzgado para ir a la cárcel por asesinato

– Bien, cuando obtenga algo señor, pues puede ir hacia aquí para que hagamos un juicio contra esa persona y todo lo que haga falta, y si resulta que no es pues será inocente, y entonces le soltaremos, y así hasta que encontremos al asesino, y si en el caso de que sea usted-dijo señalándome a mí el señor juez- pues será juzgado y será culpable por asesinato si el caso de que es el culpable, en este caso de momento no lo es y no hay pruebas de ello de que lo sea

El juez iba a dar con el mazo para acabar el juicio de una vez, por un momento canté aleluya y querer despejarme de todo esto y buscar pistas contra alguien que no sea yo y que sea el culpable de verdad, pero antes de que diera con el mazo diciendo que dada finalizada el tribunal de justicia, antes de que pasara eso entró alguien que conocía perfectamente, era John y tenía una foto de una cámara sacada de una cámara de seguridad y dijo: