|MIRACULOUS LADYBUG| Siguiendo nuestros instintos |Fanfic Lemon +18|

ACTO I, PARTE 2: Bañándose en la luz de la luna〈Marichat✕Adrinette〉

-C-Chat Noir... ¿Qué estás-?- Preguntó la chica, siendo silenciada rápidamente por el héroe que había colocado un dedo por sobre los labios de ella.

-Calla princesa, no queremos despertar a nadie, ¿no crees?-Preguntó en un susurro mientras sonreía de manera coqueta a la joven. Ella le miró extrañada.

-¿Qué estás haciendo aquí?- Preguntó apenas audible, mirando al felino con rareza. El chico se limitó a acercarse de manera coqueta a ella, sujetándola ágilmente de la cintura mientras que con una mano atraía la de la contraria a sus labios, plantando un beso en el dorso.

-¿Debo de tener alguna razón como para querer ver a mi princesa?- Cuestionó él con una sonrisa juguetona. La ojiazul no pudo hacer más que sonrojarse y esquivar su mirada, apartándole suavemente.

-Chat, ya es tarde, deberías irte...- Dijo ella alejándose de él, mirándole completamente extrañada.

-Oh, pero princesa, deberías saber que los gatos salimos de noche, y además, no querría irme tan rápido, he venido a visitarte al fin y al cabo...-Le dijo con una sonrisa mientras se acercaba a ella lentamente y la hacía retroceder hasta chocar con una pared. Colocó su mano junto a su cabeza, cortándole el paso. Pudo notar como un sonrojo crecía por sus mejillas mientras ocultaba su mirada y comenzaba a temblar. Parecía un ratoncito acorralado.

-C-Chat... ¿Qué te pasa?- Preguntó ella con la voz algo temblorosa, evitando mirarle a los ojos, porque sabía que en cuanto eso pasara quedaría completamente indefensa... Aunque no era mucha la diferencia, a decir verdad.

-Es solo que...- Llevó su mano a su mejilla, acariciándola con dulzura. Bajó desde sus pómulos hasta su mentón de manera lenta y suave, para luego frotar con cuidado sus labios con la yema de su pulgar, mirándolos atento. Vio como la joven estaba completamente nerviosa, y soltó una risa que la sobresaltó. Apartó su mano, y se acercó lentamente hasta quedar a unos milímetros de distancia -Llega un punto en donde no quiero controlarme más...- La peli azul se sorprendió, y el gato aprovechó para besarla tiernamente, apenas juntando sus labios. No deseaba obligar a la chica a nada, pero tampoco quería frenar sus impulsos, era algo completamente nuevo para él, y agradecía enormemente a que Plagg hubiese estado de acuerdo para ayudarle, ya que como Adrien Agreste jamás tendría el valor para hacer semejante cosa.

Marinette sentía millones de cosas en ese momento, eso era inevitable, pero tenía tantas cosas en la cabeza que no podía decidir cuáles eran sus prioridades. Primero estaba Chat, su fiel compañero de batallas, el mismo que hasta hace poco le coqueteaba a Ladybug y creía gustaba de Chloé. Pero también estaba la relación que habían forzado él y Marinette, las visitas nocturnas, los secretos confiados, todo eso que lo habían vuelto su mejor amigo, y también que habían hecho que ella experimentase un amor completamente distinto al que sentía hacia Adrien. Era algo más cálido, algo tranquilo pero terriblemente espontaneo, era calma, pero emoción y ansiedad, era millones de cosas, y cada una más bella que la otra. Pero aunque sintiese que lo amase, no podía dejar que eso continuara. Tikki ya le había advertido que involucrarse mucho con Chat Noir podía hacerle correr peligro, a ella y a todos sus seres queridos...

Aunque, ¿qué tenía de malo? Por fin estaba siendo correspondida, y aquellas sensaciones que le hacía sentir el héroe eran completamente embriagantes y adictivas, tanto que simplemente no quería hacerlas a un lado.

El temblar de la chica cesó un poco, y aprovechó para colocar sus manos en los hombros del rubio, correspondiendo su muestra de cariño. Chat Noir entendió aquello, y llevó sus manos a la cintura de la ojiazul para profundizar un poco más el beso, pasando sus manos intranquilas por bajo de la blusa que llevaba puesta, acariciado su espalda con sus garras. Marinette al sentir aquello soltó un pequeño gemido por la sorpresa, y el héroe utilizó aquella instancia para introducir su lengua dentro de su boca. Ella tembló enseguida, era primeriza en estas cosas y no tenía idea que hacer. Cerró con fuerza sus ojos, y sintió como el calor de su cuerpo comenzaba a aumentar a medida que la sinhueso de Chat avanzaba por su cavidad bucal, recorriéndola sin dejar ningún espacio desconocido. Era algo totalmente desconocido para ella, y temía el no estar a la altura de su compañero... ¿Él había hecho esto antes? ¿Él había estado con otra chica de esta manera? Miles de ese tipo de preguntas perturbaron su mente, y tratando de ignorar su creciente nerviosismo se apegó al cuerpo del felino, abrazándole por el cuello. Se armó de valor e intentó seguir la lengua de él, tratando de bailar a su ritmo.