La Séptima Flecha

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Ya la séptima, vamos terminando este pequeño viaje...

Esta relación la puedo describir en una sencilla y a la vez compleja oración: Corta pero Grande.

Hablemos de como conocí a Ana, en mi época fiesta en fiesta con un grupo de conocidos. Una noche nos invitaron a unos quince años en un lugar un poco lejos de donde vivía yo, pero llegamos.

La fiesta estaba muy activa! Claro había familia de la quinceañera (claro no la conocía, eso era normal de nosotros), y ya estábamos en una mesa bebiendo whisky (me encanta), y de la nada llego una chica con un vestido hermoso, el cabello lacio, se veía hermosa.

Y como si fuera raro en mi vida... Ella invito a unos de los chamos con los que había ido, solo pensé "jajaj no importa luego buscare una para mi" (obviamente era un pensamiento como Motivador, por que como ya deben de saber un poco de mi, no soy muy sociable ni me da entablar una conversa, solo quería olvidarme del tema).

Siguió la noche, bebiendo, riendo, y me olvide de ella. Pero no me di cuenta que el chamo que ella invito a bailar... Pues el no quiso.

Un pensamiento irónico me vino "ojala me hable", pero como soy, sabia que no pasaría. Pero luego, sentí algo tocandome la pierna debajo de la mesa, pensé "bueno ya creo que estoy borracho aunque no tome casi...". Y me da por mirarla y me estaba sonriendo; me dijo "es la mano peluda" jajajaj no lo podía creer!.

La primera chica que vi en la noche, la cual me gusto apenas la mire me estaba coqueteando! Me sonroje, me halague, y sentía en mi rostro una sonrisa idiota...

Me dijo bailemos, me daba pena ya que no soy bueno bailando... Siguió pidiéndome bailar al pasar de la noche hasta que acepte.

Bailamos durante horas, claro sabía que no lo hacia bien pero lo importante es que disfrute.

"¿te puedo besar?"
-El dos pies izquierdo.

Se lo pedí, y me dijo "si tu quieres hazlo". Uno de mis mejores besos... Una corriente de adrenalina junto dopamina recorría mi cuerpo! Esa chica me hacia erizar la piel al besarla mientras su familia estaba detrás de mi. Fue genial, me acuerdo de aquel beso hoy, y aun siento la piel erizada.

Al rato yo estaba claramente borracho, por una discusión familiar se acabo la fiesta. Ella anoto su numero en mi celular. Me sentía, tan, feliz! Y con mareo..

Acordamos y nos veíamos como en una clase de plaza, disfrute mucho esas tardes besándola y comiendo chocolate con ella, hablando de cuantos niños tendríamos, de donde viviríamos...

Nuestras discusiones eran a propósito de mi parte por que me encantaba su acento al hacerla enojar, de como no me gustaba su deporte favorito (el fútbol), fueron muy buenos esos dias.

Bueno, así pasaron unos meses. Hasta que un día mi madre decidió ir de vacaciones todos... Claramente yo no quería ir, no me quería alejar de ella (creo que siempre supe que si me iba, acabaría todo), no pude hacer nada para quedarme.

La ultima vez que estuve con ella fue como para despedirme, en mi interior sabia que pasaría algo, hablamos un rato de todo un poco de como haría lo posible para comunicarme con ella. Pero sentía algo, muy extraño en mi pecho, cuando supe que era se lo debía decir antes de irme o no tendría otra oportunidad, me temblaban las manos, sentía un nudo en la garganta y con casi lágrimas en mis ojos se lo dije...
"te amo!"
Me miro a los ojos, y solo me abrazo. Y mis pensamientos mas negativos fueron reales, no me dijo nada... Un beso y un "ahí viene mi autobús" fue lo ultimo que viví con ella.

Al irme de viaje me iba dando de cuenta que la señal era espantosa, supe que no estaría comunicado con ella frecuentemente... Pasaron días desde que llegue y no podía comunicarme con ella en ningún medio, fue horrible dejarle de hablar a una persona con la cual pasabas días enteros a su lado.

Las pocas veces que pudimos hablar no lo hacíamos bien y discutíamos, dure 2 meses allá... Y la tercera semana se acabo todo; creo que esta demás mencionar que el resto de la estadía no la disfrute para nada...

Pasaron los meses y volvimos a hablar poco a poco, tenemos esa clase de tradición de hablar el primero de enero; y hasta hoy en día lo seguimos haciendo y conversamos todos los días. Aunque nuestras relación termino de una manera, algo difícil.
No le presto mucha atención, me empeño mas en conservar esta amistad que me gusta por el camino que va...

Las ocho Flechas Erróneas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora