-Bien entonces, ¿el viernes en la noche?-dijo asegurándose. Yo asentí a regañadientes mientras él sonreía divertido, tomaba su mochila y salía por la puerta.
Habíamos acordado que haríamos el trabajo en mi casa porque al parecer no había otro lugar disponible. Seguía sin gustarme la idea de tener a Peter Parker como pareja de laboratorio. El chico era extraño.
Un dia se comportaba como un pequeño demonio y al día siguiente era todo misterios y sonrisas. Algo no encajaba con este chico y claramente ya no sabía si debería seguir odiándolo o si solo debería ignorar su existencia.
***
Esto es ridículo, llevo una hora y media esperando a que el chico se aparezca sentada en el sofá de mi casa viendo el reloj como una tonta. Para mi suerte nadie estaba en casa. Papa tenia turno en el hospital y Alec había salido. Al parecer él y Mónica habían tenido una fuerte pelea por Skype y según él, necesitaba aire fresco.
Tome mi laptop y comencé a buscar información usando una de las páginas que me había dado Peter, mientras poco a poco iba escribiendo el informe. Que el chico no se apareciera, no quería decir que no iba a hacer el estúpido informe. Quería una buena calificación, y si Peter no se aparecía entonces era mejor que se fuera despidiendo de su nota, porque si él pensaba que dándome unas páginas de internet bastaban como para llenar su parte del trabajo entonces el chico había estado soñando con ponys y arcoíris.
Después de más o menos dos horas los ojos comenzaron a arderme y las palabras se comenzaron a entrelazar en mi cabeza y en ese momento sonó haciendo que mis manos gritaran de felicidad.
El reloj marcaba las 9:30. Tome la botella de agua que había estado tomando de la mesa de roble y decidí que si era Peter en la puerta, entonces iba a tener un muy bonito baño.
Abrí la puerta lista para tirarle todo el agua en la cara cuando escuche el chillido de alguien.
-Soy yo, soy yo.- dijo la voz de Audrey rápidamente. Me asome en la puerta y vi a mi pequeña amiga con un cola de caballo y usando una pijama de Mickey Mouse mientras sostenía en sus manos una caja de Dunkin' Donuts. Comencé a reir al ver su cara horrorizada.
-Lo siento, pensé que eras Peter.-dije haciéndola pasar.
-Así que no se apareció eh.- dijo dejando la caja en la mesa del centro y tirándose en mi sofá.
-Nop, ni un mensaje.- dije naturalmente sentándome a su lado.- Aunque ahora que lo pienso, eso no me extraña ya que no tiene mi número de teléfono.
-De todas maneras me parece extraño que no se haya aparecido. Siempre es responsable con sus trabajos.- se encogió de hombros y tomo mi laptop observando el informe.
-¿Y...que haces aquí?- pregunte curiosa al hecho de que se apareciera tan noche en la puerta de mi casa.
-Pues resulta que mis padres tenían una cena fuera de la cuidad y Ryan recibió una invitación de último minuto a una fiesta universitaria. Así que estaba sola y aburrida y pensé, ¿Por qué no visitar a mi pequeña rubia amiga?-dijo sonriéndome.- Además quería venir a verificar si Peter y tú no se habían matado todavía.- yo reí.
-Mi papa y mi hermano salieron también, aunque...espera un minuto...-dije frunciendo el ceño.- ¿Dices que tu hermano está en una fiesta?- ella asintió.- Eso significa que Peter de seguro fue con el.-dije dándome cuenta que ahora todo tenía sentido.- Imbécil, que ni crea que le voy a regalar la nota.-dije indignada.
-¿Tu enserio crees que este con mi hermano?- Me pregunto Audrey dudosa.
-Claro, ni lo dudes.
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Mi gran apuesta ➳ Sin editar
Teen FictionAnnasophia Williams perdió a su madre hace solo 9 meses, su padre en un acto desesperado por empezar de nuevo decide pedir una transferencia al hospital en Denver, donde Anna entra a South High para cursar su último año junto a su hermano Alec. Todo...