OBSESIÓN

CAPÍTULO 28

DETECTIVE GARAY

No encontré nada que me pareciera extraño en el archivo de Luka, me parecía que era un buen chico, pero algo dentro de mi me hacía desconfiar, él tenía una miradá dura, fría, como si no tuviera sentimientos.

Revise de donde venía antes del cambio de escuela y me llamó la atención que la ciudad de donde venía era la misma de donde años atrás habían matado a la chica Margarit.

Busque en la computadora si tenía algún antecedente por delitos que hubiera cometido y me sorprendió que los tuviera, y más me sorprendió el porque.

Le habían levantado una denuncia por acoso a una chica menor que él, los padres al ver su insistencia en seguir buscando a su hija se mudaron de ciudad y solo quedo ese antecedente. Algo dentro de mi me decía que me estaba acercando al secuestrador de Ariadna.

Saque los archivos de los casos que se parecían en cuanto a la forma de actuar del asesino, la forma de tortura y el acoso, eran 5 casos parecidos comencé a leer y a ver las ciudades y una idea cruzó por mi mente, si ese chico era el asesino de todas esas jovenes, yo tendría que ir a cada ciudad e investigar si el había estado viviendo ahí y sobre todo encontrar algo que uniera nuestros casos o todo sería circunstancial.

Tardaría unos días más en encontrar a Ariadna, pero tal vez podía resolver los casos pasados, y encontrarla aun con vida y sobre todo encontrar a ese mal nacido hijo de puta, tenía que arriesgar todo para detenerlo.

Sabía que estaba arriesgando mucho y sobre todo arriesgaba una vida, pero no tenía la certeza de que ella aún siguiera con vida y ahora que había encontrado un poco de espranza para descubrir al asesino de todas esas niñas, no podia dejarlo pasar.

Se que no era mi decisión y que estaba mal pero si ese chico era el demente que había estado buscando todos estos años no dejaría pasar esta oportunidad y me enfocaria en atraparlo.

No hay tiempo que perder he pedido las autorizaciones pertinente para emprender el viaja a la primer ciudad donde fue el asesinato de la primera chica Hailey Moore la niña de 11 años.

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---- Levantate maldita perra, que es lo que estas haciendo--- entró Luka a mi celda, gritando y tomandome del cabello.

---- Detente me lastimas, basta----Yo suplicaba, no sabía que lo había enfadado.

---- Eres una maldita zorra, me has estado viendo la cara de estúpido, con cuantos me has engañado hija de puta---- trataba de alejarme de él, no entendía de que hablaba, yo no podía salir de aquí, como podía engañarlo.

Continuó golpeandome, recibí patadas y más puñetazos en el rostro me tiró al suelo, vi como se quitaba el cinturón para después comenzar a golpearme con el, yo sólo gritaba de dolor y frustración por no poder detenerlo, pero el había acabado con mis ganas de vivir, día a día era una tortura diferente, una golpiza sin motivo alguno, yo ya no resistía ni mentalmente y sobre todo físicamente el me estaba destrozando y pronto acabaria conmigo.

----Madeleine, por que haces esto lo tienes todo maldita perra, por que me traicionas---- me había llamado Madeleine, quien demonios era ella, no lo entendía.

---- Yo no soy Madeleine, me estas confundiendo, Luka soy Ariadna, detente---- grité con todas mis fuerzas antes de que me golpeara con la lampara que habia tomado.

Parecía que habia reaccionado y de pronto y por un breve momento pude ver dolor en su mirada, parecía despertar de un sueño, se dejo caer de rodillas y me miro como si no entendiera que hacia yo ahí.

Me sorprendía su actitud, estaba realmente loco y yo podia ver la demencia en su rostro, y en ese momento entendi que yo terminaría muerta muy pronto.

El no diferenciaba entre una alucinación y la realidad que estaba viviendo, no se que lo impulsaba a ser así o como fue que llegó a ese nivel de locura pero tuvo que ser muy grave y no creo que yo y Maya seamos las únicas a las que ha secuestrado.

Tenía que planear como escapar de este maldito encierro, que cada día me estaba enloqueciendo más por la desesperación, por cada tortura y violación que recibía día con día mi cuerpo ya no resistía y pronto terminaría colapsandose.

El quería destruirme y lo estaba logrando y eso me llenaba de terror, yo nunca había sido débil pero el había doblegado cada parte de mi ser a su antojo.

Pero no permitiría que el fuera el dueño de mi vida y mucho menis de mi muerte, así tuviera que quitarme yo misma la vida.

Es muy pequeño este capítulo, pero les juro que mejorare y pronto subiré el siguiente.