En busca de la felicidad

La hora del baño

MATT

Ya habían pasado dos semanas de la cena con mi padre y casi tres semanas que los gemelos estaban con nosotros.
Todo había estado muy tranquilo estos días, incluso era delicioso no escuchar peleas ni llantos por un gran periodo.

Ethan: Alexander ven aquí inmediatamente- listo, llegó el sabor amargo.

Alex: NOO...- yo sabía muy bien lo que estaba pasando en la segunda planta.

Ethan: Lex hijo, se te enfriara el agua, metete ya al baño.- si alguien me dice que solo los niños pequeños hacen berrinche por darse un baño, yo encantado le grabó un vídeo de los gemelos.

Alex: esta vez quiero hacerlo solo.- se estarán preguntando, ¿por qué a un niño de 13 años no se baña solo?, digamos que si lo hace, pero necesita constante vigilancia.

Ethan: no caeré de nuevo Alexander, la última vez solamente te mojaste el cabello, así que no, hoy igualmente te acompañaré.

Después de esa declaración, lo único que se escuchó fueron unos pies bajando a toda velocidad por las escaleras.

Ethan: no corras por las escaleras Alexander que te puedes caer.- ni me di cuenta cuando había terminado de bajar, ya que al segundo estaba de cara al suelo.- ay hijo, te lo dije.- me levante rápidamente y me acerqué a Lex para revisarlo.

Una vez seguros de que nada le había pasado, Ethan empezó con el regaño. (innecesario desde mi punto de vista)

Ethan: ya ves por qué te decimos que no puedes correr en las escaleras.- mi peque asintió con su cabeza mientras sollozaba después del golpe que se había llevado.- los papas no dicen las cosas por qué si Alexander...

Alex: lo siento... Buaa- la verdad yo no estaba muy de acuerdo con el regaño. Claro que lo de no correr el las escaleras era cierto, pero después del susto que se llevó, lo único que el peque quería era consuelo.

Por suerte Ethan comprendió mi mirada penetrante y alzó en brazos a Lex y lo empezó a consolar.

Ethan: ya no llores más Lexito, ¿te diste muy fuerte?- era una imagen muy tierna la que tenía en frente.

Alex: snif... No me hables como bebe- podía decir una cosa, pero por cómo estaba Alex, parecía un bebé aquí y en todas partes.

Ethan: pero si eres mi bebe... Tu hermano y tú son nuestros bebes, así tengan 100 años serán mis pequeños bebitos.

Luego de unos cuantos minutos y una vez que Alex estaba más calmado, Ethan subió con él para que se bañara.

Yo por mi parte, me fui a buscar a Andrew que estaba desaparecido.
Lo encontré en el salón de juego del segundo piso jugando en su móvil.

Matt: ¿qué haces tesoro?- el levanto brevemente su mirada del móvil en modo de saludo.

Drew: iba a ver una película.- me senté a su lado y rompí todos sus deseos.

Matt: siento decirte esto, pero tienes que bañarte ahora...- su cara se fue desfigurando para dar paso a un adorable puchero.

Drew: no quiero, estoy limpio me bañe ayer.

Matt: pues hoy, mañana y todos los días tienes que bañarte, así que vamos antes de que se nos haga más tarde.

Drew: noo- está era una de las pocas cosas por las que Andrew hacia berrinche, por lo general era un niño muy tranquilo y bien portado, no así Alexander que tenía fama de berrinchudo.

Para hacer el proceso un poco más corto, tome a Andrew de los brazos y trate de levantarlo del sofá, cosa que no fue muy fácil ya que hizo peso muerto y prácticamente termine arrastrándolo.

Entre forcejeo, el chico me dio un golpe seco en la cara.

Drew: ups, papi lo siento, no quería...- normalmente les dejaba pasar algunas cosas a los gemelos, digamos que no era tan estricto como Ethan, pero lo que no soportaba era las faltas de respeto... Mucho menos un golpe.

Matt: ves lo que provocas con tus pataleos.- está vez lo tome con más fuerza y me acerqué al sofá para luego tirarlo encima de mi regazo.- al papa no se golpea por ningún motivo Andrew...

Drew: lo siento papito...- se notaba bastante el arrepentimiento y hubiera deseado que no se haya metido en un problema tan grande y dejárselo pasar.

Baje los pantalones deportivos que tenía puestos y comencé el castigo.

PLAS PLAS PLAS PLAS lo siento papi PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS buaaa PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS auu buaa papá PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS

Una vez terminado el castigo lo senté en mi regazo y lo mantuve allí, hasta que calmo sus gimoteos por completo.

Drew: snif... Lo siento.

Matt: estas perdonado mi vida, pero ahora sin pataletas, iremos al baño y te darás una ducha...- puso su lindo puchero nuevamente, pero esta vez estaba más o menos de acuerdo.

Drew: ¿puede ser un baño de burbujas?- como ven, "más o menos".

Matt: por supuesto tesoro...

Por suerte después del baño, ambos chicos cayeron rendidos en una profunda siesta, que nos daba por lo menos, media hora de (aburrida) paz y tranquilidad a Ethan y a mí.