La soledad y yo decidimos hacer un pacto, que mientras me siga dando unas dosis de ansias y de nostalgias, yo seguiré en pié a su lado, seré su mártir en una batalla que ya fue conquistada por ella.
Tan violenta que quema y vuelve cenizas mi corazón.
Mis hora solo conoce la amargura y tristeza.
Que se alimenta de los recuerdos que desespera y enloquece mis días enteros.
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Eterno, Un Poema.
Thơ caPara los que miran las estrellas y ven más allá de ellas. Impredecibles e infortunios poemas teñido de angustia, dolor y tristeza. Pero lleno de amor como gotas del rocío ante el alba. Parte #1 Todos los derechos del autor©