Garras, colmillos, ojos negros, estar perdida en medio de un bosque, eran las imágenes que pasaban por mi cabeza, no sabía si estaba dormida o despierta, pero las mismas imágenes se repetían una y otra vez por mi cabeza sin parar, todo pasaba muy rápido y las imágenes siempre me llevaban a una persona siempre y esa era EL. Sentí que el auto se detuvo y Dylan se bajo, yo estaba muy dormida, sentí como me cargo en sus fuertes brazos y me llevo hasta una habitación, me deposito en una cama muy grande...
Todo estaba muy oscuro cuando desperté, y obviamente esta no era mi habitación, no solo porque sabía dónde estaba, si no porque esto era gigante en comparación a la mía, era por lo menos 4 veces más grande, grandes cortinas cubrían las ventanas, todo era antiguo aunque encajaba perfectamente con el estilo de hoy, todo estaba pintado de gris y negro, eso fue algo que no me sorprendió por obvias razones claro, seguí observando hasta que me fije en una maleta que estaba junto a la cama; esto tenía que ser una broma, esa era mi maleta, por dios si solo habían pasado unas horas ¿cómo era posible que todo hubiera ocurrido tan rápido? Bueno a estas alturas ya nada me sorprendía así que solo respire profundamente y seguí observando.
Recorrí la habitación un rato mas hasta que no tuve más remedio que ir hacia la puerta que daba a un pasillo, estaba a punto de salir cuando escuche que alguien entraba por la ventana, voltee a ver quién era y me quede en shock cuando vi a Dylan mirándome con ojos curiosos.
- Hola! ¿Qué haces aquí? ¿Acaso te perdiste linda?
- Aléjate de mí por favor! Ya no soporto que estés a mi lado, por favor solo dime donde esta mi madre – dije rogándole un poco, ya no tenía fuerzas para seguir con tantos enfrentamientos.
- No sé de que hablas, pero te prometo que lo solucionaremos linda, pero antes dime ¿Cómo llegaste hasta aquí?
- ¿Estás mal de la cabeza o algo? Tú! Me trajiste hasta aquí por la fuerza diciéndome toda esa basura de que soy tu pareja, loba o lo que sea – dije confundida y un poco alterada, no era posible que ahora este loco me tratara como si nada hubiera pasado.
- Oye linda, Yo no te he traído aquí en primer lugar y por favor se mas amable conmigo, porque yo no he hecho nada para qué me trates así – dijo dolido y podría decir que hasta ofendido, esto tenía que ser una broma de verdad.
- Pero ¿qué rayos te pasa Dylan? Me traes aquí a la fuerza y ¿ahora me tratas como si no me conocieras? Tú simplemente me desconciertas.
- Dylan! ¿Acaso me has dicho Dylan?
- SI! ¿Ese es tu nombre no? O es que ahora me vas a decir que te diga perro faldero.
- YO NO SOY DYLAN! y te voy a dar un concejo linda, YO! NO SOY NINGUN PERRO FALDERO.
- Vete a la mierda loco desquiciado, solo déjame irme por favor, no quiero estar aquí.
- Soy su gemelo.
- ¿Cómo que su gemelo? ¿Esto tiene que ser una broma?
- No es ninguna broma, yo soy Darius!
- Apártate de mí por favor! Solo falta que ahora tú también me digas que eres mi lobo o algo por el estilo.
- En realidad apenas te conozco y eso es algo que no se da de la noche a la mañana, bueno he oído de algunos casos que sí, pero lo cierto es que no es mi caso, aunque debo admitir que hueles de maravilla – dijo acercándose un poco más a mí. Eran exactamente iguales, mismo cabellos, ojos, cuerpo, hasta la voz era igual, esto fácilmente podría tratarse de una broma, porque no sabría como desmentirlo, era verdaderamente frustrante.
ESTÁS LEYENDO
Tuya
WerewolfAcaso crees que has leido algo impactante? lee esta historia hasta su final porque lo que pasara nadie se lo espera.