Sueles sufrir por cosas de verdad pequeñas, que de la nada se hacen gigantescas, no sabes como, pero te das fuerza y animo y al rato ni te acuerdas de que te estabas apoyando a ti misma.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.