Alma Sentenciada (África Zavala & Mihai Gâdea)

AS 004: Mi protector

Capitulo 4 - Mi protector

INT. MANSIÓN BUSTAMANTE, PISCINA. DÍA.

Al segundo día, Roxana está sentada en una silla en la piscina interior de la mansión acompañada por su mejor amiga Agatha. Las dos toman sendas margaritas charlando.

Roxana: Y tu ¿no deberías estar en el hospital con Benito? No vaya a quitártelo alguna muerta de hambre y te quedes chiflando en la loma. (Bebe de su margarita)

Agatha: No te preocupes, cariño, que no me lo van a quitar. (Bebe de su margarita) Por cierto, y tu ¿Qué onda? ¿No tienes ningún proyecto más?

Roxana: No, de momento no me han llamado todavía no me olvido que tenían que llamarme para esa telenovela pero esa desgraciada de Blanca Soto me ha quitado el papel para Señora Acero. (Con odio)

Agatha: No te preocupes, amiga, ya llegara tu papel para afirmarte. Por cierto, ¿has oído que Pierre Lacroix piensa venir a México?

Roxana: ¿El productor?

Agatha: No, el zapatero (Irónica) ¡Obvio que el productor, amiga! Podías aprovechar el momento y metértele por los ojos así logras algo.

Roxana: Buena idea, amiga (Sonríe coqueta)

León llega a besar a su prometida. Se acerca vestido de traje.

León: Ya me voy, mi amor, regreso en la noche. ¡Te amo! (La besa en los labios)

Roxana: ¡Yo tambien te amo, mi amor! (Lo besa en los labios)
León se va. Roxana queda charlando con su amiga.

Agatha: Me encanta su relación, espero que la mía con Benito sea igual. (Sonríe tomando su margarita)

Roxana: Claro que sí, amiga, veras que si (Bebe tambien)

Agatha: Y con Adolfo ¿cómo van las cosas?

Roxana: Van sí, yo no le hago caso él no me hace caso, me importa poco lo que diga yo amo a su padre con toda mi alma.

Agatha: Así se habla amiga

INT. CASA DE ROSA, COCINA. NOCHE.

Rosa esta cenando en compañía de su hermano Raúl. Los dos charlan.

Raúl: Te noto pensativa ¿qué te pasa? No me digas que te han corrido del trabajo

Rosa: No es eso es que... (Pensando en lo que paso con José Fernando) es que... don José Fernando intento abusar de mi

Raúl: (Enfurece) ¿Qué? ¿Cómo que...? (Respira con dificultad) Rosa... mañana voy a hablar con él (Decidido)

Rosa: ¡No, Raúl! ¡Tú estás enfermo! ¡Cálmate que tu corazón esta débil!

Raúl: Me importa poco no voy a permitir que nadie te haga daño ni mucho menos ese hombre.

Rosa: Por favor, Raúl... (Lo mira)

Raúl: Esta bien... (Suspira, la mira) ¡No quiero sentirme impotente!

Rosa: ¡No lo estás haciendo! ¡Prométeme que no iras! ¡Promételo, por favor!