Desahogarme

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Tal vez no tuvimos de esas típicas historias de "amor".
Porque lo cierto es, qué nunca fuimos nada, es que lo nuestro era algo así cómo... no sé como chucha describirlo, porque lo de nosotros no tenía etiqueta alguna.
No éramos novios, ni tampoco "amigos con beneficios".
Durante todo este tiempo, nunca pensé poder sentir lo que siento ahora, sabes que soy toda una cursi y a veces suelo salirme del tema, pero esta vez no es así.
Durante estos 2 años nunca he sido capaz de decirte absolutamente todo lo que pienso de ti y lo que pienso, resulta ser difícil pero cuándo haces que saque mi lado no tan lindo, exploto y digo casi lo que debería haberte dicho hace bastante tiempo.
Soy de las que nunca se quejan y reclaman. Soy más bien una de las personas que si quieres decirme o hacer algo, pues que le "nazca".
Y durante de todo éste tiempo se cómo tratarte, se ya lo qué me dirás después de que te diga esto.
Me asusto por eso, e incluso tu te has dado cuenta.
Hemos dicho que siempre estaríamos juntos, que siempre nos apoyaríamos, del uno al otro.
Hablamos del futuro como sería y yo añoraba que mis hijos fueran los tuyos, que los nombres que queríamos para nuestros bebés sean llamados así a las pequeñas criaturas que tendría en mi vientre.
Por Dios, me paso de enferma.
Que realmente me hiciste en mí, cómo fue que cambié tanto y ahora soy así.
Recuerdo cuándo te invité a mi casa junto con otros amigos para que no se viera " sospechoso " pues justo caía en una fecha de presentación.
Y antes de llegar a mi casa todos nuestros amigos más a llegados hicieron una "Corte dé Honor", una linda e inesperada Corte de Honor.
Todos nos molestaban, y te decían que seas mi "caballero", y tú sin titubear aceptaste.
Pusiste tu antebrazo delante de mí para poner mi mano sobre la tuya, sin tocar palmas.
Fue una de las mejores experiencias y fue captada en vídeo y fotos, hechas por mi madre por supuesto.
Y después de comer te diste cuenta que aún faltaba darme mí "regalo de cumpleaños", y consistía en darme mazazos en mi trasero, el número de mazazos era hasta completar mí edad.
Era gracioso porque yo cumplía 16 y habían hecho corte de honor, la cual se hace a los quinceaños.
Bueno no interesa.
Recuerdo que me hiciste correr por todo el barrio, haciendo que todos nos voltearán a ver pero lo que me percaté fue de que solo éramos tu y yo, nadie mas.
Entonces me convenciste que nadie me haría daño si estaba contigo.
Le agarraste de la mano, y entrelazamos nuestros dedos. Nunca había sentido tal cantacto contigo, me ruborizaba y tu sólo veías al frente sin verme, sin tratar de reír y yo hice lo mismo, sin decir nada.
Pero fue una trampa, me agarraste y me llevaste con los demás, bueno no me engañaste, fue en realidad que los demás nos buscaban y nos encontraron así que tuviste que actuar normal.
Ese día dejaron mi qlo morado.
Eso no podía quedarse así, así que yo también te deje el qlo morado.
Y aún me sigo riendo porque aún no recuerdas y me lo sigues sacando en cara.
Luego el día de tu cumpleaños llegó, yo no tenía ningún regalo para ti, porque sabía que nada de lo yo te diera sería suficiente además no tenia presupuesto.
Pero ese día fue nuestro primer beso, fue en nuestro bus de regreso de una presentación. Si, no estoy orgullosa del lugar pero todo se dio nunca lo planeamos.
Luego pasó 1 mes y nos dimos un pico, por culpa de la pareja más melosa del grupo. Y también casi casi como nuestros mejores amigos, decían ellos que íbamos a terminar como ellos porque su historia se parecía a la nuestra.
Y hoy en día puedo decir que se equivocaron y yo tenía razón.
Coqueteos, risas y una que otra palabra y ocurrencias bonitas.
Así se resumió el 2015.
Y lo terminamos de una forma, para inesperada.
Nuestra primera salida, el día de nochebuena.
Fuimos al cine, me abrazaste porque hacía frío y dijiste que mi cabello siempre tiene un olor muy "bueno".
Torpezas ese día, parte tuya y la mía.
Comimos chocolate y varias cosas más y regresamos a mí casa temprano porque mi madre así te lo dijo, ese día también nos agarramos de las manos.
Y cuándo me dejaste en mi casa hablaste con mi mama bromeando, así que yo fui a dejarte para que cogieras auto.
Nuestro último pico, del año.
Y el último que me diste hasta ahora.
Luego el 31 de Diciembre y los primeros días de Enero fueron mi perdición.
Nunca entendí porque pero... desde ahí ya no hablamos, hasta después de 1 mes y medio y volvimos a tener comunicación te extrañaba, pero ya no sabía si tu me extrañabas a mí.
Todo se complicó y ahora ya nada es lo mismo.
Intenté arreglarlo, pero no pude hacerlo.
Decías se habías madurado y que por eso ya no actuabas como antes.
Se que éstas roto, alguien te hizo daño y no quieres que lo sepa.

Compre lo he dicho siempre, a veces me asusto por conocerte tan bien, me asusto saber lo que vas a decirme, cómo sera tu maldita reacción.
Es que no era un secreto que yo te quería y que aún lo hago con la misma fuerza en la que lo hice la primera vez que te vi.
No fue un "amor" primera vista, no se si pueda etiquetar esto como amor, y si lo fuera así no es algo a primera vista, tuvieron que pasarnos bastantes cosas para conocernos del uno al otro lado incluso llegar a este punto de esto.
Cómo fue que terminé así, cómo fue qué terminamos así.
Al no saber nada del uno al otro y si se sabe del uno pues casi no se da nada de importancia.
Hubo tanto tiempo de pensar, meditar las cosas pero concluí que lo único bueno que tendré son los recuerdos.
Y quiero mantener cada uno de ellos en mi cabeza y que cada vez recuerde solo ría, ya no solo llore cómo siempre lo he hecho.

Me duele que ya no haya esa confianza de antes y esas conversaciones absurdas.

Me duele que ya no sea nada igual.
Extraño tus abrazos, con tus brazos fuertes que de alguna manera hacen que no quisiera estar en otra del mundo que no sea allí.

❤+💙=💜.

Notas de Autor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora