Capítulo 24

120 6 0
                                    

Capítulo 24: PAPÁ...

Me pregunto dónde estará Harry, me habría gustado que nos acompañara a Matt y a mí, en fin, tiene que hacer su trabajo.

Me siento emocionada de poder salir con Matt, de poder convivir más con él.

Me pongo algo cómodo y voy a su habitación. Antes de entrar, toco la puerta, me abre y me sonríe.

-Estoy lista.-digo.

-Bien, vamos.

Salimos de la casa y subimos a su auto.

Recuerdo cuando llegue por primera vez aquí, fue en este automóvil. Recuerdo que odiaba a Matt, y ahora... lo quiero mucho, quizá no es el padre que cualquier chica deseé, pero me quiere y me protege, eso es todo lo que necesito.

Volteo a verlo, se ve concentrado manejando. En sus gafas se reflejan un poco los rayos del sol y puedo apreciar sus brillantes ojos azules. Su cabello es castaño, lacio, con un peinado extraño, y su barba lo hace ver un hombre interesante. No puedo negar que Matt es atractivo, me pregunto si ha tenido más novias en el pasado, creo que la respuesta es obvia.

-¿En qué piensas, pequeña? -me pregunta sin apartar su vista del camino.

-Nada, es sólo que... me siento feliz de estar contigo.

Matt sonríe, miro hacia enfrente y veo que hay un semáforo. Matt detiene el auto y me mira.

-¿De verdad? -me pregunta incrédulo.

-Sí.

-Y tú no tienes idea de la felicidad que siento al tenerte. Te quiero mucho, mi amor.

-Yo a ti, Matt.- aclaro la garganta.- Papá.-me corrijo.

Matt esboza una deslumbrante sonrisa, puedo ver en sus ojos llenos de felicidad. ¿Acaso fue demasiado rápido? No lo creo, en verdad salió de mi corazón llamarlo así.

-Me siento... tan feliz.-dice.

Sólo le dedico una sonrisa y voltea a ver el semáforo que ya cambió de color. Matt arranca el auto de nuevo y sigue el camino.

-¿A dónde quieres ir? -me pregunta.

-Al lugar que sea.-sonrío.

-¿Vamos al cine? Después de eso podemos ir a cenar.

-Claro, me encanta.

Matt sonríe y sigue conduciendo, sin apartar su vista y concentrado en lo que hace. Es un hombre increíble.

Llegamos al cine, está repleto de personas, familias, niños, parejas. Bajamos del auto y entramos. El olor a palomitas llega a mis fosas nasales. Hacia tanto tiempo que no venia. Nos acercamos a la cartelera., hay muchísimas películas.

-¿Cuál te agrada? -me pregunta Matt.

Le echo un último ojo a todas, hasta que por fin me decido por una.

-the conjuring.-respondo.

-Es de terror, ¿no importa?

-No, ¿acaso te asusta, Matt?

-Claro que no.-ríe.- entonces... veremos the conjuring.

Vamos a las taquillas y compramos los boletos para entrar a la función.

Tuvimos que esperar veinte minutos para entrar a la sala, llegamos un poco tarde. Entramos y tomamos asientos. La película comienza. Tomo mis palomitas y comienzo a comer unas pocas. De acuerdo, esta película si que asusta. Algunas veces me escondo en el pecho de Matt, él ríe pero me abraza. Casi en toda la película es lo mismo. Me alegra poder tenerlo a mi lado.
No puedo creer que acabé con todas las palomitas, ahora estoy sedienta.

La película termina, tomo mi vaso de soda y salimos de la sala. Matt ríe al recordar como me escondía en él.

-Dijiste que no le tendrías miedo.

-Mentí.-río.

-Lo sabía.-ríe.-, bien, ahora ¿vamos a cenar?

-Claro.-sonrío.

Matt me abraza y comenzamos a caminar. Creo que a lado del cine hay un restaurante muy lujoso y la comida es deliciosa. Fui una vez que mi mamá salía con un hombre maduro y muy adinerado.

Mientras Matt y yo caminamos hacia la salida del cine, veo a una persona que no podría olvidar jamás. Volteo a ver a Matt, su mirada también está fija en ella. Es como si la hubiera llamado con el pensamiento.

Mi madre.

NEGOCIOS MISERABLES - HARRY STYLES Y TUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora