Capítulo 44.

103 6 1
                                    

Capítulo 44: 
Esta chica es tan jodidamente ardiente…maldita sea, con tan sólo besarme me pone completamente excitado.

Me despierto temprano como todos los días. Suspiro y me levanto de la cama.
Tomo mi celular para revisar la hora; tengo 4 llamadas perdidas de Steven. ¿Qué carajos quiere ahora? No pienso devolvérselas.
Antes de arrojar el celular, reviso la hora y lo apago. De esta forma no seguirá molestando. Idiota.
Lo que me pondrá de buen humor ahora es ver a mi ______. Con tan sólo pensar en ella se dibuja inmediatamente una sonrisa en mi rostro.

Abro la puerta de mi habitación y comienzo a avanzar por los pasillos. Miro a todas partes buscándola. Hasta que por fin la encuentro; se mira frente a un espejo.

Sonrío y me acerco a ella lentamente con cautela.
Coloco mis manos sobre su cintura y levanto la mirada para ver hacia el espejo. Desde ahí, ella me mira fijamente. Deposito un beso en su cuello y se estremece.

-Bonjour, ma chérie. –le susurro.

Humedece sus labios, suspira y de media vuelta para verme de frente. Toma mis brazos y los envuelve en su cintura.

-Amo cuando me hablas en francés.

La miro un momento; tiene puestos unos shorts, no son tan cortos, ni tan largos, pero deja ver sus piernas, sus sexys piernas. La acaricio un poco y le doy un pequeño beso sobre los labios, éste se escucha por toda la habitación.

-Matt se fue…-me dice- tenía que ir a sus análisis.

-¿Qué podemos hacer ahora? –le dedico una sonrisa picara.

-Quizás…-me besa-… no lo sé. ¿Qué se te ocurre a ti?

Comienzo a besar su cuello, sé que eso la vuelve loca. Respira agitadamente, mientras acaricia mi cabello.
Esta chica es tan jodidamente ardiente…maldita sea, con tan sólo besarme me pone completamente excitado.
Acaricio sus piernas, y no puedo evitar poner una mano en su trasero, está tan bien formado. Ella ríe un poco y da un pequeño gemido. Joder… ahora si me ha puesto duro.
Repentinamente, deja su juego y se aleja de mí para mirarme burlona.

-¿Por qué no salimos?

-¿Planeaste ponerme así? –señalo mi erección.

-Quizás…-ríe.

-Nunca cambias, _____.

-Vamos, Harry… hacemos el amor tres o cuatro veces a la semana.

-Si por mi fuera lo haría contigo todo el día y todos los días.

Ríe y se acerca a darme un pequeño beso. Toma mi rostro entre sus manos y me mira fijamente. Arquea una ceja.

-Eres un completo pervertido. –se aleja de mi y da media vuelta.

-Igual me amas ¿no es así?

-Por supuesto –vuelve a mirarme- Harry… vamos a salir.

-Hubiera preferido quedarme a…-río- ¿Quieres dar una vuelta?

-Vale, algo así.

-Está bien… pero…como bajo esto-lo señalo y río.

-No lo sé… es tu problema.

-Pero tú lo provocaste.

-Date una ducha o algo así. Estaré abajo.

Ríe y se aleja de mí. ¡Qué mujer!

Cierro la puerta del auto y lo enciendo con las llaves. El motor comienza rugir, hasta que por fin arranca. El auto comienza a avanzar, fijo mi vista en el camino, pero me distraigo un poco para darle una pequeña mirada a ______, se ve algo nerviosa jugando los dedos de sus manos.

-¿Qué ocurre? –le pregunto.

-Estoy un poco preocupada.

-¿Por qué?

-Por Matt… quizás debí de haberlo acompañado.

-Todo va estar bien. –Sonrío- Te lo prometo.

-Eso espero.

Casi todo el viaje estuvo lleno de silencio, ése tipo de silencio que es realmente incomodo. Quizás debería hacer que deje de preocuparse, pero en realidad no soy bueno dando ese tipo de consejos.

Llegamos a una cafetería, digamos que es la más famosa de Los Ángeles, en ésta hacen el café más delicioso que pueda existir, es mi favorita.
Bajo del auto y luego me dirijo con _____ para abrir su puerta. Me sonríe y toma mi mano.
Repentinamente volteo hacia un lado, veo un automóvil negro con vidrios polarizados, obviamente es imposible poder visualizar las personas que hay dentro, pero casi podría jurar que nos estaba siguiendo.

Vuelvo a ver a _____ y le sonrío.
Dentro, un hombre rubio de ojos color miel, de aproximadamente 19 años, nos lleva hasta nuestra mesa. No puedo dejar de ver las miradas que intercambia con _____, aprieto mis puños para contenerme un poco. Imbécil, ella es mi chica.

-Te pareció lindo ¿ah? –le pregunto jugando con una servilleta.

-¿El lugar? ¡Oh, claro!

-No hablaba del lugar.

-¿No?

-Hablo del muchacho… se ve que le gustas -hago una pausa- Y que te gusta.
Gira la cabeza para poder verlo, ése chico no deja de verla. Los celos me carcomen

-Es lindo –ríe.

-Ajá.

-Harry… tu servilleta.

Bajo mi mirada, la he arrugado completamente. La arrojo a la mesa y bufo mientras ella ríe.

-¿Estás celoso? –pregunta.

Veo a una morena sentarse en la mesa de enfrente, es del tipo de chicas con las que solía acostarme. Tiene un increíble trasero. Sonrío.

-No –digo serio- Estaba muy ocupado viendo el trasero de esa chica.

Ella voltea a verla y luego me mira con furia.

-¡Eres un idiota! –exclama.

-Vamos, no seas inmadura.

-¿Inmadura? –Se levanta de la mesa- Si piensas que vas a jugar conmigo te jodiste ¿de acuerdo? ¡Me largo de aquí!

Me levanto de igual forma y la detengo antes de que comience a avanzar.
Miro hacía la puerta de entrada y veo entrar a dos hombres con lentes Ray Ban obscuros, ambos con una arma.

Reacciono antes de que todo comience. Arrojo al suelo a _____ y me pongo sobre ella para protegerla.

Entonces empiezan los disparos.

+++++++++++++++++++++++++++++++++++❤

No me gusta entre meterme en la historia pero gracias por leer y votar, espero que les guste mucho.❤👌

❤👌

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
NEGOCIOS MISERABLES - HARRY STYLES Y TUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora