El anillo de de la Muerte y mi partida

874 41 5
                                    


 Me despierto en medio de una habitación con colores negros y rojos sangre, inmaculadamente limpia excepto por la ropa que esta tirada en el suelo y la cama desacomodada en donde me encuentro.

-Un nuevo día- digo sentándome en la cama perezosamente.

Observo mi habitación un poco adormilado, cuando me acuerdo de la conversación del día anterior con mis padres, me dejo car nuevamente en mi cama.

Por fin me levanto, veo en el espejo a un chico extremadamente apuesto con pelo alborotado de color negro azabache y ojos de color verde electrizante, me dirijo al salón principal.

Mis padres me esperan en el salón principal, a su lado se encuentran mis dos hermanos Lilia con un vestido largo verde botella que contrasta con su pálida y blanca piel, con una ligera sonrisa de lado en el rostro y Timeus con mirando hacia enfrente como un soldado bien estrenado, su rostro tan impenetrable y calmado con las manos en la espalda.

-Hola, Sebastian – dice mi padre un tanto incomodo -¿Listo para tu nueva vida?

-No, pero ¿tengo opción?- respondo alzando las cejas.

-No- contesta mi madre tragando saliva-Primero tienes que cambiar tu ropa por la de los humanos.

-Pero es extraña y sosa- contesto haciendo una mueca de disgusto.

-Es necesario que pases desapercibido, tienes que llevar ropa de humanos- me cambia la ropa en un instante por unos jeans de mezclilla, una camiseta blanca, unos tenis de vestir blancos y una chaqueta de cuero negra.

-Pues...., no está nada mal- contesto mirando la ropa nueva.

-Te daremos todo lo que necesites en esta maleta mundana- Aparece de la nada frente a mí una maleta llena de ropa y otros materiales que ocupan los humanos.- Tu nombre será Sebastián Black, eres un alumno de intercambio desde Canadá, vivirás con la familia Jones en el condado de Funkstown Washington en el estado de Maryland Estados Unidos, tienes que ser agradable.

-¡Pero si soy el encanto en persona!

-¡Si, claro!- escucho carraspear a Timeus en voz baja mientras voltea los ojos.

-¿Cómo encontrare el camino?

En la mano de mi madre aparece un anillo de plata antiguo con una piedra de jade en el medio, la plata se retuerce de tal manera que forma rostros y manos tratando de alcanzar la piedra ovalada, la jema tiene grabada en el centro una pequeña "B" de plata- este anillo es de tu padre.

Observo que Lilia de repente se ve muy interesada en la conversación, especial mente en el anillo.

-¿Dónde lo encontraste?- pregunta mi padre con los ojos en blanco.

-Pues a donde van todas las cosas que pierdes- dice mi madre rodando los ojos.

-¿Y a dónde van?- pregunta mi padre aún más desconcertado que antes.

-Al almacén junto a los calabozos, dha- contesta mi madre como si fuera muy obvio.

-¿Tenemos un almacén junto a los calabozos?

Mi madre rueda los ojos y voltea de nuevo hacia mí- ¿Sabes que es este anillo?

-¿Un anillo familiar?- pregunto desconcertado -¿Para qué me servirá un anillo familiar en la Tierra?

-Idiota- escucho carraspear a Lilia- No es un simple anillo, es el anillo de la Muerte, es el anillo más poderoso que haya creado Hefesto- dice poniendo los ojos en blanco y con la voz algo subida de tono- Si hubieras prestado la mínima atención a la historia familiar, sabrías que hace ese anillo.

Enamorada de un DiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora