Historia De Una Joven Cristiana

Capítulo 2

Después de un largo día en la escuela enseñandole las inmediasiones del colegio al chico de los ojos color verdes y el cabello castaño, que se me aparecio en plena charla con mi amiga, y con el montón de tarea que me habian dejado los profesores, y eso que fue el primer día de clases no me quiero imaginar el segundo, en fin tuve una buena mañana.
Llego a mi casa muy emocionada por mi cumple y en eso esta mi mamá esperandome en la puerta de la entrada, me saluda con un beso en la mejilla y un abrazo, esos de oso, felicitandome por mis 15 años.
En lo que voy entrando gritan: Sorpresa!!... Doy un pequeño saltito por el susto hasta que empiezan a cantar como esos cantantes de ópera, el feliz cumpleaños y yo con mi cara toda roja por la vergüenza. Hasta que terminaron de cantar me quede parada jugando con el brasalete que tenia en mi muñeca, que momento más incómodo!. Terminan y todos mis familiares presentes en mi casa me saludan, algunos con un beso en la mejilla, otros con un golpesito en la espalda y otros ni me saludan.
Mi papá siempre tan bueno, me da mi regalo antes que todos los invitados y me dice "el de papá se habre primero", le muestro una media sonrisa y empiezo a abrirlo; mientras todos preguntan "que sera?".Abro el regalo, me quedo mirandolo y era...un vestido! Como esos vestidos de las princesas. Voy hacia mi papá le doy un abrazo y le digo "Gracias papá, esta hermoso, te amo".
Y no pudo faltar el regalo de mi mamá que como saben ella era muy detallista, toma el regalo, me lo da, empiezo a abrirlo y en eso veo algo de color rosa era...una biblia! con un estuche y una agenda color café. Me paro abrazo a mi mamá y le digo "me regalaste el tesoro mas preciado del mundo que es la palabra de Dios, gracias mamá te amo! En ese momento mi papá se enojó y se fue a beber al bar que queda a 4 cuadras de mi casa; me sentí triste porque yo deseaba que él pudiera dejar el alcohol y en eso mi mamá me dice "no te preocupes hijita ya Dios a su tiempo lo cambiará",le sonrió y sigo habriendo los demás regalos.