Hanna Hell Heaven.

Capitulo uno.

NARRA HANNA.

Si Justin, si me quiero casar contigo!

-Hanna, deja de soñar con Justin y levántate. -Me dijo mi nana gritando. ¿Nunca han querido matar a alguien? Porque yo sí. ¿Algún consejo para esconder un cadáver?

Me levanté lentamente, sintiendo como los putos rayos del sol entraban por la maldita ventana. Estaba muy enojada, mi nana me levantó en la mejor parte. Me iba a casar con Justin Bieber!!!! Por si fuera poco, le di una hojeada a el calendario y efectivamente, hoy era el día de mi funeral (las notas).

-Hanna tienes colegio, date prisa. -Me grito mi nana.

-Ya voy nanita.

Abrí lentamente la puerta del baño, me quité la ropa y puse play a la música. Sonaba Love Yourself de Justin Bieber.

-MY MAMA DONT LIKE YOU AND SHE LIKES EVERYONE!

-CÁLLATE ESTUPIDA -Me grito mi hermano. Y si señoras y señores, tengo un hermano Playboy.

Luego de minutos cantando y de escuchar a mi hermano decir cosas como "de cantante te mueres de hambre" "me sangran los oídos" "va a llover" por fin terminé y estaba secándome el cabello. Luego de largos minutos de secarme el cabello y maquillarme, terminé. Elegí ponerme un vestido blanco más arriba de la rodilla, unos tacos de flores, mi cartera MK y unas gafas doradas. Luego baje y nana tenía el desayuno listo.

-Hermana, juro por Dios que si tú no fueras mi hermana, me casaría contigo. -Dijo mi hermano seductora mente.

-Claro, y si tú no fueras mi hermano no hubieras salido tan bello como yo. -Le guiñe un ojo.

-Solo eres dos minutos mayor que yo. -Se quejó.

-Eso es suficiente para ser mayor, ¿no lo crees? -Lo desafíe.

-Niños, niños, paren ya por favor. -Dijo mi nana ya muy cansada de escuchar lo mismo todos los días. -Sus padres llamaron, vienen mañana. -Dijo nana. Mi hermano y yo nos miramos y pusimos cara de horror.

-Nana, ¿porque ellos vienen? -Dije. Diablos estoy frita. Solo tengo 7 A y 1 B y me van a matar por esa B.

-Si nana, porque vienen? -Dijo mi hermano apoyándome.

-No se mis niños, yo solo soy una simple empleada y ellos no me tienen que dar explicaciones.

-No digas eso nana. -Mi hermano y yo nos paramos y la abrazamos. -Haz sido una madre y padre para nosotros. -finalicé.

-Mi hermana tiene razón, si en estos 17 años hemos visto más de 20 veces a nuestros padres sería demasiado.

-Ay mi Dereck, ay mi Hanna. Cuanto los adoro.

-Nosotros a ti. -dijimos al unísono. Luego de eso, me fui con mi hermano porque no tenía ganas de conducir hoy.

-Hermana tengo que decirte algo importante..

-Y ahora que hiciste Dereck? -Dije enojada, siempre se metía en problemas.

-Voy a reprobar una materia.

-¿QUÉ TÚ QUE? TÚ SÍ SERÁS CABRON!! ES QUE NO LO PUEDO CREER, ERES UN ESTUPIDO. -Grité.

-Es que la maestra estaba bien buena y le dije que si quería follar conmigo. -Me dijo inocentemente. Yo me giré como el exorcista y lo callé con la mirada. -Esta bien, mejor hablamos en otro momento de eso. -Susurro y yo asentí.

Llegamos al colegio y todos se nos quedaban mirando. Sí, éramos los más populares y también los más temidos de todo el colegio. Mi hermano me ofreció su brazo y yo lo acepté gustosa. La realidad era que siempre estábamos el, Nick, Jonathan, Samuel y yo. Yo era la única mujer del grupo, pero no se crean que por ser una popular ya me he tirado a medio colegio. No. No soy así. Eso se lo dejo a Brithany, Yessica y a esas. Pero, si era muy ruda. No me dejaba intimidar por nadie. Era la típica "bicha" que no hablaba con nadie, que miraba mal a todo el que se le acercaba y la que intimidaba solo con la mirada. Pero no era mala persona. Si veía que a alguien le hacían algo, ahí iba yo de superhéroe a defenderlos.

-Hermana, escuché que hay un chico nuevo en el colegio, ¿le damos la bienvenida?

-Vamos. -Dije. De camino nos encontramos a Nick, Jonathan y a Samuel. Le contamos sobre la bienvenida y aceptaron. Eso de la "bienvenida" era solo un saludo, pero siempre nos gustaba ser los primeros, y esa era la regla número uno y todas las personas lo sabían. Luego de 10 minutos encontramos al chico. Lo examiné primero y realmente se veía totalmente "sexy" y rudo. Tenía tatuajes y una cara de "si te me acercas, te mato" pero venga, yo también tenía la misma cara. Nos acercamos a él y nos miró de forma extraña.

-Bienvenido a el colegio Martin Luther. -Le dije yo.

-Gracias. -Contestó fríamente.

-Tenemos reglas que darte, y como nuevo que eres tienes que saberlas. -Dijo Nick.

-Si no las sigues tendrás problemas. -Continuó diciendo Jonathan.

-Demasiados serios diría yo. -Finalizó Dereck.

-Díganme las reglas. -Dijo el de forma desafiante.

-Primero, mi hermana no se toca.

-¿Quién es tu hermana? -Preguntó.

-Yo. -Dije cortante. El me miró y sonrió. Qué bipolar.

-Segunda regla, no te quieras hacer más que nosotros. -Dijo Dereck muy serio. Siempre se tomaba esto de las reglas muy seriamente.

-¿Qué pasaría si quiero ser parte de ustedes? -Preguntó. Nosotros nos miramos un poco serios y confundidos. Nunca nadie antes había dicho eso. De repente todos me miran a mi esperando a que yo hablara.

-Entonces te haremos unas pruebas. -Dije yo firmemente. El solo asintió muy despacio. -Dame tu número. -Le dije. El me miró confundido y esbozando una sonrisa. -No te emociones, necesito mandarte la dirección. -Dije a lo que arqueaba una ceja. Me dio el número y nosotros nos fuimos.

-¿Cómo carajos dijiste que le haríamos unas pruebas? -Dijo Dereck.

-Ni siquiera sabemos qué tipo de pruebas. -Dijo Jonathan.

-Concuerdo con Jonathan. -Finalizó Nick.

-Vamos chicos, no tenemos todo el día. Hay alguien a quien observar. -Les guiñé el ojo.

-Como que observar? -Preguntaron.

-Esa es la prueba, no puede juntarse con nerds, con los gamers, con las zorras, ni mucho menos con los pobres. Si supera este día, será uno de nosotros.

-Que tiene de malo los gamers? -Preguntó confundido Dereck.

-Nada. Pero nosotros jugamos cuando nadie nos ve. Una cosa es eso y otra cosa es relacionarse con esa gente. -Dije yo, y todos asintieron "entendiendo mejor."