Me desperté por el sonido de mi teléfono al recibir mensajes.
—¿Quién puede ser tan temprano?—pregunte con el ceño fruncido.
Me estiré y tomé el teléfono me fijé en los mensajes y decían:
Jonathan: ¡Saraya!
Jonathan: ¡Sarayaaaaa!
Jonathan: ¡Sara!
Jonathan: ¡Raya!
Jonathan: ¡Ven a mi habitación!
Jonathan: ¡Ahora!
Jonathan: ¡Por favor!
Pues, ¿qué le habrá pasado? Me levante, tomé mi teléfono y salí de mi habitación así sin más.
Llegué a su habitación y toqué la puerta, nadie abría. Toqué de nuevo y nada.
Intente abrirla para ver si no tenía seguro y resultó ser así. Cuando la abrí asomé la cabeza por la puerta y se miraba tranquilo, entre lentamente y al estar completamente dentro de la habitación camino un poco.
—¿Jonathan?—pregunte mientras me adentraba más a la habitación.
Su cama estaba sin tender y había unas que otras prendas de él tiradas en algún lugar del cuarto.
—¿Jonathan?—empecé a preocuparme—¡Ambrose esto no es gracioso!—fruncí el ceño mientras miraba para todos lados.
Me fijé en su cama y ahí estaba su teléfono. Me preocupé aún más, empoce a buscar en el baño, nada.
Cuando salí del baño siento cómo alguien me tapa la boca y me rodea con su brazo. Intenté zafarme pero no pude, era más fuerte que yo. Con mi mano intente tocar su cabello, al sentirlo algo rizado y desarreglado supe quién era.
Me zafe de su agarre y lo mire alto enojada con la respiración agitada por el susto. Y él empezó a reír.
—¡Jonathan! ¡No vuelvas a hacer algo así!—lo empuje levemente y después me reí con él. Tenía un short deportivo y sin camiseta.
—¿Por qué vienes así?—me pregunto nervioso mirándome.
—¿Así como?—pregunte confusa.
—Tan presentable—hizo comillas con los dedos en la palabra "presentable"
Fruncí el ceño y luego mire lo que traigo puesto, solo tenía mi pantie y una camiseta de tirantes, y no suelo ponerme sostén cuando duermo.
Me sonroje y me cubrí el pecho con mis brazos.
Jon rió dulcemente y se cruzó de brazos.
—Te ves linda cuando te sonrojas—bien, eso no está ayudando, solo provocó que me sonrojara más—Mira, Stephanie me dijo que teníamos que pasar el día juntos, ¿y qué mejor que una PIJAMADA?—dijo tratando de imitar la voz de una mujer al final y agitando los brazos.
Me reí negando con la cabeza.
—Bien, solo deja ir por mis cosas.
—¡No! Quédate así, solo ponte sostén o lo que sea que las mujeres se pongan y lo que creas necesario para sobrevivir—dijo sentándose en la cama.
Solo reí y rodé los ojos.
Salí de la habitación, y fui a la mía. Me quite la camiseta de tirantes, me puse un sostén y volví a ponerme la camiseta. Tomé mi cargador, desodorante, perfume, y otros panties; todo lo guarde en una backpack. Me agarré una liga en el cabello y y fui a la habitación de Jonathan. Toqué la puerta y Jon abrió, me dejo pasar y coloque la backpack en una esquina del cuarto.
—Y bien, ¿qué haremos?—le pregunte con una sonrisa.
—Primero que nada, tenemos que desayunar algo—dijo torciendo el labio.
—Cierto, ¿llamo a servicio a cuarto?
—Por favor—dijo asintiendo.Tomé el teléfono de la recámara y llamó.
—Hola, buenos días... Me podría traer unos Waffles... Sí, con mermelada... Espere, Jonathan, ¿qué vas a querer tú?—dije alejando un poco el teléfono.
—Un omelette.
—Y un omelette, por favor... Muchas gracias—colgué el teléfono—No tardarán en traerlo.[...]
—¡Jonathan, jajajajajajaja, suéltame!—Jon me hacía cosquillas y no podía evitar reírme.
—Di la palabra mágica—dijo mientras me hacía cosquillas.
—Jajajajaja, ¡por-jajajaja-favor!
—Nope.
No paraba de reírme, ya ni podía hablar. En eso se escucho que alguien abrió la puerta y fue cuando Jonathan dejó de hacerme cosquillas.
—Oh, lo siento tanto... No quería interrumpir—dijo la señora que venía entregar el desayuno.
—No se preocupe,—dijo Jon sonriendo—tome—le dio propina—Muchas gracias—le sonrió, tomó el desayuno y la señora se retiro.
Crucé mis piernas para esperar el desayuno y poder comerlo en la cama.
—Permítame, bella dama. Llevarle el desayuno a la cama—dijo tratando de imitar al típico chico de película.
—Dame el jodido desayuno, Jonathan—reí y extendí los brazos para que le pasara el plato.
—Uno que trata de ser amable, ¿y para qué?—dijo fingiendo enojo y solo me reí por la forma en que lo dijo.
Me dio el desayuno y le coloque delante de mis piernas.Ya estaba anocheciendo y le estaba enseñando a Jon cómo hacer trenzas en mi cabello, pero por más que intentaba, no podía.
—¡Me rindo!—dijo cruzándose de brazos y haciendo puchero.
Me reí y le seguí el juego.
—¿El bebé se enojo?—dije haciendo la típica voz que hace una madre cuando le habla así a su hijo.
Jon asintió con el ceño fruncido y con un puchero.
—No tiene porque enojarse el bebé—dije haciendo también un puchero y lo abrace—Pero dejaste mi cabello un desastre, al menos cepíllalo—digo separándome de él y le di un cepillo.
Me volteé y él empezó a cepillar mi cabello con delicadeza, hasta que quedó suave y sin pelos enredados.
—Gracias—le dije sonriendo—¡Merece una foto!—saque mi teléfono y se lo di a Jon para que sacara la foto.
Nos acostamos boca abajo Jon extendió los brazos para que los dos pudiésemos salir, coloqué mi mano en su hombro, acerqué mi cara a su cabeza y justo cuando tomó la foto fruncí el ceño y el salió desprevenido.
—¡Me encanta!—dije al mirar la foto.
—¡Pero yo salí mal!—se quejó Jon.
—No es verdad, sales bien. De todos formas la subiré—dije riendo.
La publiqué en Twitter e Instagram.Estábamos en la cama tapados y se me ocurrió ver una película en Netflix, le dije que pusiera la de Coraline porque esa película me encantaba desde pequeña.
Tenía la cabeza recargada en su pecho descubierto y él tenía su mano en mi brazo.
Cuando se terminó la película note que Jonathan estaba dormido, trate de no reírme porque le estaba cayendo babita de la boca. Bostecé y me quede dormida en el pecho al descubierto de Jon.
ESTÁS LEYENDO
No somos tan diferentes -Dean Ambrose and Paige- (No se terminará.)
FanficPortada hecha por: @BlueHolland Esta historia esta basada en Jonathan Good (Dean Ambrose) & Saraya-Jade (Paige). Esta historia está narrada por Saraya. Se enfoca en el año 2014; cuando Saraya debutó en el Main Roster. Precaución: Esta narración ten...