El echo que yo no hablé no quiere decir que no sienta, la verdad es que si me importa todo lo que pasa a mi alrededor sólo que he aprendido que a nadie le importa mis problemas, no es fácil saber que eres el centro de discusiones en casa y mucho menos que gente de mi se ha separado sólo por no comprenderme.
Cuida de quien en los momentos más difíciles te tienda la mano y te motivación pues Dios nos pone ángeles en el camino disfrazados con sonrisas transparentes.