Sahara estacionó su automóvil enfrente de la casa y volteé y me encontré con Mark y mis padres platicando, también estaba Jimmy con un gorro gris en su cabeza ya que se le había comenzado a caer sus cabellos castaños por las quimioterapias.
Asimismo me impresione porque cada vez que Mark les decía algo, mi familia sonreía.
Le di una señal a Sahara para que se fuera y corrí para llamar la atención de todos y lo logré. Abracé a mi familia y cargué a Jimmy para darle un beso en la frente también saludé a Mark y el me recibió con un beso en la mejilla.
Estaba feliz, más que nunca; mi familia había vuelto a casa o eso creo y bueno al parecer Mark ya se presentó ante ellos.
-Bueno familia, el es Mark mi...
-Si hija, ya nos habló de todo y nos ha agradado
-Que bien, me da gusto- sonreí
-De hecho lo invitamos a cenar
-Pues adelante vamos a pasar, que la familia está unida- dije y todos sonrieron.
Entramos en la casa y mamá fue a la cocina para preparar comida, mi papá fue con ella y Jimmy se quedo con Mark y conmigo.
Jimmy fue por un juego de mesa para pasar el rato, después de jugar miramos algunas fotos, en una salía yo con dos coletas, unos moños rosas y un vestido rosa con unas calcetas blancas y zapatos negros.
-Que bonita eras de niña- dice y sonrió
-Gracias
-Pero ahora eres hermosa
Me sonroje al escuchar eso, la verdad estaba pasando unos buenos días y creo que comenzaré a decir que mi vida es maravillosa.
Unas horas después mamá nos habló para cenar, cosa que me sacó de mis pensamientos.
Entramos a la cocina y mamá sirvió en la mesa espaguetis con albóndigas a cada plato, en medio, una jarra de té helado de limón. También olía a un delicioso postre dentro del horno.
Nos sentamos todos en la mesa, agradecimos a Dios por los alimentos luego empezamos a comer.
Acabamos y nos servimos jugo, mamá se levanto de su silla, abrió el horno y sacó el postre, vi que era un pastel de chocolate, mi favorito.
Terminamos de comer los espaguetis y las albóndigas y nos servimos un trozo de pastel y un vaso de té. Al terminar de comer todo, Mark se levantó de la silla, lo que me pareció extraño y dijo:
-Disculpen pero tengo que irme, ya es algo tarde y mi casa está lejos.
-Muy bien, fue un gusto conocerte- dice mi papá.
-Igualmente a todos, muy buena comida señora, que te mejores Jimmy, adiós Sam.
