Los Juegos Del Hambre 2 (TEO)

Un Encuentro Con Olor A Pescado

Annie... hace cuanto no la veo en los juegos... estuve tan consentrada en Teo que se me olvidó por completo.

Estaba embarrada de pies a cabeza. Llena de sangre por la cara. Tenia rasguños y cortes. Su pelo era un intento de trenza. Que le jugaba en contra porque cuando se lo desate ... uf... bueno...

Cuando ella los vio quizo correr pero no podia moverse.

- Buenas Buenas señorita...

Ella los miraba con odio.

- Dejenme.

- Estabamos buscando a tu compañero... no tendras idea de donde esta, o si?

Ella espero un segundo y dijo...

- No. Lo van a matar?

- Qué dices? Es nuestro... -dice Gabi pero Connor la calla-.

- No lo se -dice Connor-.

Como que no lo se?!

- Dónde esta? -le vuelve a preguntar-.

- No lo veo desde el baño de sangre.

- Son compañeros de distrito. Tendrias que saber...

- Bueno... no lo se. -ella toma su hacha y los amenaza con la mirada- vallanse.

- Por que lo hariamos? -se rie Connor- tenemos un tributo menos o una aliada...

- Un??? Tributo??? Menos??? YO TENGO A 4 MENOS.

- Ah si?

Ella buscaba ayuda pero no puede. Estaba frita. Iba a morir. Quedaria solamente Teo. Teo. Teo. No puedo mas. NECESITO A TEO.

NARRA TEO:

Segui caminando por el bosque. Sigo oyendo pisadas. Pero no hago nada.

*crunch crunch*

Zoë, Daniel, dónde estan?!

- Quién esta ahi?? -se que suena estupido preguntar esto, pero a esta altura ya nose que esta bien y mal-.

Nadie me responde. Era obvio.

- QUIEN ESTA AHI MALDITA SEA!

Lo digo gritando. Si es alguien que salga. Por mi uno menos.

- Tú eres Teo? -dice una chica con ojos celestes y pelo bien rubio-.

- Quién eres tu? -digo con mi espada en la mano-.

- Perrie, tributo femenino del distrito 3.

Distrito 3?! Es compañera de August.

- Oh... hola... eres...compañera de ... un aliado mio.

- August?

- Asi es.

- Ah... me dejo ahi tirada como si nada... se dejo llevar por los profesionales.

- Aja. Eso parece.

Quedo un minuto de silencio.

- Me vas a matar? -digo-.

Ella tenía el pelo tomado por una colita hecha una trenza.

Abre los ojos como platos.

- Oh no. No. O al menos por ahora no.

- Oh... y... que quieres exactamente?

Ella tomo su arco y dijo.

- Nada. Estaba siguiendote, porque, bueno, queria saber que hacias sin los profesionales.