Scarlett | [PAUSADA]

Reconcilio

Finalmente le conté todo sobre Patrick  a Mía.
—¡Tienes que hablar con él! Las cosas no pueden quedar así. —me dijo Mía al terminar mi relato de lo sucedido.
—Lo sé, pero no lo he visto y no responde mis llamadas, o mensajes.—respondí.
—Si él no viene a ti, tú vas a ir a él. Nada de "Si lo amas, déjalo ir", o alguna otra ridiculez, si de verdad lo quieres, vas a buscarlo, y punto. —me ordenó.
—Pero, ni siquiera sé donde vive!
—Si se encontraban siempre, no debe de vivir muy lejos, no?

Cuando Mía me dijo eso, no creí que fuera tan fácil encontrarlo, le preguntamos a un par de vecinos, y dimos con su casa. Cuando llegamos me puse nerviosísima, ni siquiera sabía que iba a decirle, pero ya estaba aquí y era muy tarde para arrepentirme.
¿O no?
Tal vez, podía marcharme y...

Antes de que pudiera siquiera terminar la frase en mi mente, Mía ya estaba tocando el timbre y después de unos segundos, ahí estaba.

Ahí estaba Patrick.

Y cuando Patrick me vio, inmediatamente su cara se tornó seria. No parecía nada feliz de verme.
—Bueno, yo mejor los dejo solos, tengo ir a hacer... Mmm... Algo. Nos vemos mañana, Scar! —dijo Mía al notar la tensión del momento y se marchó.
—Y bien, que estás haciendo aquí? —
preguntó Patrick, con un tono despectivo.
—Vine porque hay que hablar.
—No tengo nada que hablar. ¿Cómo supiste donde vivo?
—Eso no importa. Hablemos.
—Si tanto quieres hablar; te escucho. —dijo, con los brazos cruzados.
—Solo me gustaría saber que te pasa, digo, después de ese día donde te dije que deberíamos olvidarnos de ese beso, no me volviste a hablar y no entiendo.
—Intenté acercarme a ti, Scarlett! Y tú, solo me dejaste bien claro que no querías nada conmigo. ¿Cómo crees que eso me hizo sentir?
—Yo jamás te rechacé, solo pensé que deberíamos ir un poco más lento. Apenas te conozco.
—Tú no entiendes, he intentado acercarme a ti hace mucho tiempo, me gustas mucho, y no aguanto más estar lejos de ti.
—Entonces, por qué te alejaste más! Tu también me gustas, yo solo quería ir un poco más despacio, pero tú desapareciste completamente.
—Es que, yo había intentado todo para impresionarte, y después de ese beso tan especial, pensé que lo había logrado, pero tú llegas al siguiente día y me dices que hay que olvidarlo? No, las cosas no son así.
—Cuando lo dices así suena muy mal, pero tienes que entenderme, no estoy preparada para una relación. ¿Podemos comenzar solo siendo amigos?
—Esta bien, podemos. —me dijo, y forzó una sonrisa.