Fugaces.

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Te echo de menos. Echo de menos todas y cada una de las tardes que pasábamos juntos, echo de menos poder abrazarte, escucharte, olerte. Echo de menos tus "te quiero", tu risa, tus porqués, tus ganas de sacarme una sonrisa ante todo. Lo peor de esos recuerdos es que nunca volverán, decidiste irte, así, sin más, dejándome con el mundo encima, dejándome aquí con todas las movidas que sólo resultaban faciles si tú estabas aquí. Fuimos como una estrella fugaz, la cual es muy bonita mientras dura pero al fin y al cabo se termina marchando. Te quise, te quise como nunca en mi vida había querido, y tú... pues me quisiste como a todas las demás. Lo di todo por ti, incluso lo seguiría dando todo por ti, aún sabiendo todo el daño que causaste. Fuiste como ese tren que nunca llega, que te esperé y te esperé pero tú decidiste bajarte en otra parada. No te echo la culpa, sólo que sepas que te echo de menos y ni se como coño decirlo, ni expresarlo, ni sentirlo. Porque a una persona que se la quiere de verdad no se la olvida ni en un día, ni en tres semanas, ni en dos meses, ni en un año. Simplemente nunca se la olvida.

Prometo EntenderteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora