Pero siempre pasa. Todo lo bueno se acaba. Y en este caso, el fin de semana con Blas había terminado.
Realmente me da igual, porque con algo con lo que estoy conforme en esta relación, es que no es como la anterior que tuve.
Solo nos veíamos el Sábado y el Domingo, a causa del trabajo.
Mejor dicho, de su trabajo.
El trabajaba en una empresa de electrodomésticos. Tenía un largo horario y no nos daba tiempo a vernos. O eso me hizo creer los 18 meses que estuvimos juntos.
Será cabrón. Realmente era un "gigoló". Más conocido como hombre de compañía o simplemente "puto".
Me tenía muy bien engañada. Hasta que le pillé. Lo peor fue con quien le pillé.
Mis padres están separados y los veo de vez en cuando. Nunca les llegué a presentar a Diego. Un día me dio por visitar a mi madre, con tan mala suerte que los encontré a los dos en la cama. Desde entonces no me hablo con ella, y mucho menos con él.
Por suerte se que Blas no es así, a menos que no me esté engañando. Pero simplemente no le da tiempo, pasa las 24 horas del día conmigo. Cosa que me gusta de esta relación, que era lo que quería decir desde un principio.
Con él, el día se me pasa volando. Verlo en la empresa me gusta, y me gusta mucho más disimular lo que somos. Me da como morbo.
Bueno, a veces. Aquí las redactoras andan un poco sueltas. Pero es lo que hay.
Llegará el día que lo hagamos oficial, ahí ya si que ninguna volverá a acercarse. Por la cuenta que les trae.
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Mi querido Jefe {Blas Auryn}
Fanfic- Muy bien señorita Marquez, está contratada. A partir de el Lunes comenzará su trabajo como secretaria. Mi secretaria. - Está bien. ¿Cuál es su nombre? - ¿Viene a trabajar aquí y no sabe ni el nombre de su Jefe? Me llamo Blas, Blas Cantó Moreno.
