Estaba caminando por el bosque con Alejandro, se notaba que se aproximaba el otoño, estábamos en el seco Chaco, nos estábamos quedando sin comida, yo no comía hace unos dos o tres días, le deba mis raciones a mi hermana, escuche un ruido, apunte con el rifle, y vi salir un chancho pecarí, era totalmente blanco, algo extraño en esos animales, mas en tal zona, baje el arma y vi que Alejandro le seguía apuntando, pero había algo en ese chancho que me hacía sentir feliz, en un segundo recordé mi saga favorita, y me vino una palabra " Profesor Remus Lupin", escuche a Alejandro recargar.
-¿Acaso estás loco?
-Tengo hambre y es un chancho-dijo apunto de disparar
-Es un Patronus no es un chancho.
-¿Qué?
-Sigo pensando que los magos existen, eso es un Patronus un hechizo.
-El apocalipsis te está afectando ¿hace cuanto que no comes?
-Dos días pero... Mira gil-El chancho se desvanecía lentamente.
-Necesito tratamiento.-Lo mire y me reí, yo sabía que eso era un Patronus solo eso podía ser, después de unas horas buscando, conseguimos cazar un chancho real, llegamos al improvisado campamento, Simón estaba resentido con Leo y conmigo, normalmente, cuando nos acercábamos al grupo donde el estaba se alejaba y se ponía a lustrar el camión, como si fuera necesario.
-Has pensado hace cuanto que no hacemos una fogata para diversión o para contar historias-Dije mirando a Alejandro, mientras cocinábamos el chancho al fuego, el asintió, en ese momento prepare una fogata pequeña y me senté, estaba anocheciendo y cada vez se veían mas estrellas, estábamos al costado de la carretera, en algún momento hace tiempo no se veían bien las estrellas, ahora era jodidamente hermosas, poco a poco se fue llenando mi alrededor, empezamos a comer el chancho, mi hermana disfrutaba, eso me ponía contento, en ese momento Alfredo que estaba al lado mío con la boca llena dijo.
-SI suguieran que van a mogid maina ¿Cuál seia su ultima comia?-Nos miramos entre todos y nos reimos.
-Creo que-Empezó Eze mirando pervertidamente a Agostina-Petiza bañada en aceite- yo lo mire le desparrame el largo pelo y empecé a reírme.
-Una chica estudiante de abogacía, que sea de las mejores con pistola-y mire rápidamente a Daniela, en ese momento Alejandro inquirió.
-Un buen asado echo por mi viejo...
-Una raviolada hecha por la madre de Julie-dijo Leo y Julie rió y asintió
-Las explosiones de chocolate que hacia la abuela-dijo Mari y miro el cielo esperando ver los castaños ojos tan parecidos a los de ella, seguimos bromeando cuando Felix pregunto.
-Abdoul, no nos conocimos bien, por eso pregunto ¿Vos y Mustafa son hermanos? ¿Qué les paso?-Abdoul se tomo un tiempo para terminar de masticar el chancho.
-Yo... si somos hermanos nos separaron cuando ambos teníamos 22 años, en San Juan... me obligaron a vivir de esclavo, me golpeaban y me daban de comer sobras, un día hice caer apropósito un montón de ropa, me golpearon con un látigo y me obligaron a dormir en un sótano, cuando salí... Mi patrón me ataco, pude matarlo con una llave inglesa y a la mujer la destripe y mutile-hizo un paro y trago saliva,-Subí a su habitación, empaque su ropa y tome un rifle que tenían, vi que mi hermano estaba en San Luis, cuando llegue milagrosamente lo reencontré.
-Es parecido a lo que me paso a mi-Dijo Leo, nos miramos y terminamos de comer, y poco a poco algunos nos fuimos quedando dormidos, pronto eso me contagio y me quede dormido. Unos gruñidos me despertaron con el puñal en la mano, un zombie de le abalanzo a un dormido Simón, lo mate lo mas rápido que pude, desperté a mi hermana, y le di una patada en la cara a Simón, desperté a Leo, Alejandro y Eze, ellos despertaron a los demás, estábamos emboscados, obligados a usar flechas, machetes, hachas y puñales, tome un machete de mi moto y mate a un par de caminantes, mi hermana solo tenia el fierro de mi bisabuelo, con el machete atravesé tres zombies, mira a la derecha y vi que Leo sucumbía por dos caminantes, sin dudarlo dos veces, no me importaba si estuviera muerto tenia que ayudarlo tenia un esposa y un hijo para cuidar, atravesé a los dos zombies con el machete y ayude a Leo a levantarse, no había sido infectado, miro a uno de los zombies y le pateo la cabeza.
ESTÁS LEYENDO
Apocalipsis Zombie Una Historia En Argentina
AléatoireCrees en el Infierno?Genial Porque Ahora Lo Veras De Cerca.