algo en tus ojos

Capitulo IV

A la mañana siguiente en algún lugar de la ciudad:
Aria ya es tarde son las 9:15de la mañana.
A cómo pudo abrió sus ojos lentamente y miro al reloj que tenía a su derecha-Dios, apenas son las 9 de la mañana y desde ya comienza a molestar.
Debería de dejarme dormir un poco más.
La noche se le hizo eterna por que en cada rincón de su habitación veía el rostro de aquel joven cada vez que pensaba en el sentía aquel cálido beso, ese primer beso que tanto había esperado para recibir de parte de aquel joven. Sentía sus labios gruesos y contorneados rozando sobre los suyos y cada vez más se daba cuenta de que lo amaba sin conocerlo bien siquiera.
Aria-dijo su madre enfadada cada vez más por no haber atendido a su segundo llamado- me molesta que tengo que hablar una y otra y otra vez para que hagas caso.
Se levantó rápidamente de su cama y pidió disculpas a su madre por ser tan terca. La verdad en cierto modo tenía razón por que, de lo que en ella concierne eran pocas las veces que le hacía caso al primer llamado.

El desayuno estaba listo y Aria se sienta y se sirve desayuno. Esto abre paso a su madre para que le pregunte sobre el instituto.
- ¿como vas con el proyecto de historia?
-tengo que salir hoy a las 4 a la casa de Dayanna para terminarlo.-le dijo Aria cruzando sus dedos, ella sabe que no es así.
-Bueno solo procura estar acá antes de las 7 sabes que a tu padre le gusta que estén puntuales en su casa. Y detestaría que el único día que tengo que verle la cara me haga un show como el que tú sabes que monta cada vez que le quedan mal.
Termina su desayuno y lava rápidamente los platos. En seguida sube las escaleras y va a su alcoba.
Toma su toalla para dirigirse al baño
Decide que esta será una larga ducha y mientras le caen las gotas de agua fría en su cabeza piensa en el día de ayer, termina su ducha y busca un lindo atuendo, busca la secadora de pelo y la plancha sabe que hoy será un día largo y nunca está de más llevar el cabello perfecto.
Enciende su laptop y entra a la red social, ve el reloj, son las 11 de la mañana.
Lo primero que aparece es un: hola hermosa.
A lo cual ella responde con un simple hola! :)
-siempre estamos para hoy a las 4:30?
-Cierto. Por poco lo olvido. Ella solo paso pensando en eso toda la noche pero para no sonar rara decidió mentir sobre eso.
Sebastian esboza una sonrisa y tiene la sensación de que no es así. Y se dispone a escribir.
-Entonces nos vemos allá.
Aria no puede creerlo, se verán hoy. Pero lo que no veía venir era lo que iba a pasar esa tarde.