12:05 PM
Le había dicho todo lo que podía sobre mi. Mis videojuegos favoritos, mis bandas favoritas. Miss shows favoritos. Mis pasatiempos. Todo. Ella mostraba más interés en lo que decía que cualquier conocido con el que yo haya conversado antes. Eso me hacía sentir bien a la vez que me hacía querer seguir hablando. Pero cada vez me quedaban menos cosas que decir. En ese momento no te de que no sabía nada de ella. Ni siquiera su nombre. Así que me detuve en silencio y espere. Ella notó que era su turno. Sin embargo, ella se mostró renuente a hablar, por lo que me evite hacerle alguna pregunta. No quería incomodarla, pero tampoco quería que terminara nuestra conversación.
-Oye, ¿tienes hambre? porque yo si, y como no conozco bien este lugar ¿porque no me muestras un buen lugar a donde pueda comprarnos algo?-le dije en un intento para alargar lo que para mi era una improvisada cita.
-Claro que si, camina conmigo, conozco el lugar perfecto-dijo ella, mientras esa tierna sonrisa retornaba a sus labios.